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Cotabato City (Agencia Fides) - Tres atentados en pocos días, y entre la población de Mindanao vuelve el miedo, mientras que las autoridades han reforzado los controles y las medidas de seguridad. Las provincias afectadas por los ataques terroristas en la vasta isla de Filipinas meridional son las de Cotabato y Sultan Kundarat, en la parte meridional de Mindanao. Los tres estallidos se produjeron en lugares públicos, abarrotados y, por tanto, cogieron como punto de mira a civiles. El 11 de octubre un mecanismo rudimentario, construido a mano, estalló en los alrededores de un Centro Comercial de la ciudad de Cotabato, poco antes de la hora de almuerzo. Otras dos bombas estallaron en los días pasados: una en la ciudad de Makilala, (siempre en la provincia de Cotabato) la otra en Tacurong city, (provincia de Sultan Kundarat) provocando en total más de 30 víctimas y numerosos heridos.
Según los investigadores, las sospechas recaen sobre el grupo extremista islámico activo en el Sudeste asiático, el "Jemaah Islamiyah", o bien sobre el grupo "Abu Sayyaf", formación terrorista que tiene su base en el archipiélago de las Sulu. Los atentados podrían ser retorsiones contra la campaña de apoyo de Filipinas a la guerra contra el terrorismo, que está realizando Estados Unidos, buscando desanimar las instituciones en la expulsión de Dulmatin y Umar Patek, dos fugitivos por el atentado de Bali (Indonesia) del 2002.
Fuentes de la policía también indican entre los mandantes de los atentados a miembros del Moro Islamic Liberation Front (Milf) histórica formación del irredentismo islámico de Mindanao, con la que el gobierno de Manila está tratando de entablar nuevas negociaciones de paz, para solucionar la cuestión de la rebelión armada y la consistente minoría islámica (6 millones de personas) que habitan la isla de Mindanao. El Milf, por el contrario, niega cualquier tipo de implicación. Según fuentes de inteligencia, podría haber colaboración y contaminación entre los diversos grupos rebeldes presentes en Filipinas Sures. La nueva estela de atentados llega en un momento en que la población de Mindanao esperaba un cambio: muchos, en efecto, esperan que la negociación entre Manila y el Milf sea precursora de un acuerdo de paz duradero y como consecuencia de una era de estabilidad, desarrollo y bienestar para la población civil.
En el proceso de reconciliación y paz también están implicados los líderes religiosos del "Bishop Ulama-Conference" (Buc) que, reunidos en Davao, ciudad en la isla de Mindanao, han lanzado un nuevo llamamiento al alto al fuego y al diálogo, único camino para asegurar una vida mejor a la gente de la isla.
Los líderes religiosos también han sugerido algunas soluciones para romper el impasse en que se encuentra el proceso de paz: el bloqueo, en efecto, podría debilitar la frente del diálogo y dejar nuevas oportunidades a grupos extremistas que no quieren renunciar a la violencia.
Uno de los puntos delicados sobre los que se ha estancado las negociaciones Manila-Milf es la cuestión del "dominio ancestral de la tierra" y el gobierno de los territorios habitados por la comunidad islámica. Mons. Orlando Quevedo, uno de los Obispos miembros del Buc, han exhortado a ambos interlocutores a "sacrificar" parte de sus convicciones, encaminando una verdadera negociación. Están en efecto en curso sesiones de coloquios preparatorios a las negociaciones reales, pero hasta ahora no han llevado a resultados concretos, tan sólo a una serie de aplazamientos. (PA) (Agencia Fides 12/10/2006 Líneas: 43 Palabras: 585)
