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Roma (Agencia Fides) - El próximo domingo, 15 de octubre, estarán en la plaza de San Pedro más de 12.000 peregrinos procedentes de toda Italia y del extranjero para celebrar el nuevo Santo Filippo Smaldone. Entre ellos habrán 5.000 fieles sordos, presentes en Roma para la canonización del sacerdote considerado como el apóstol y bienhechor de los sordos. Para permitir su participación en la solemne celebración se asegurará el servicio de interpretación de lenguas durante la canonización además de la visión del intérprete en una ventana en las grandes pantallas. Filippo Smaldone, que será elevado al honor de los altares por el Papa Benedicto XVI, nació en Nápoles en 1848 y murió en Lecce en 1923. De familia pobre y profundamente devota, fue ordenado sacerdote a los 23 años. Se dedicó con pasión al catecismo y a la pastoral sanitaria, visitando a los enfermos tantos en los hospitales como en las casas. Pensó en serio irse de misiones, pero su confesor le dijo que “su China estaba en Nápoles" y que su misión era evangelizar a los sordomudos. Por ello, se unió a un grupo de sacerdotes que se dedicaron a su asistencia e instrucción. En 1885 se trasladó a Lecce, para abrir un internado para sordomudo. Se llevó con él a tres jóvenes que preparaba desde hacia tiempo para ser las primeras religiosas de un nuevo instituto religioso que se dedicaría al cuidado y atención de los sordomudos: la Congregación de las Hermanas Salesianas de los Sagrados Corazones. Durante cerca de 40 años Don Smaldone se dedicó a su instituto, fundó otras casas, se distinguió por su celo sacerdotal, su humildad y gran generosidad, fundó la Liga de los Sacerdotes adoradores y de las Damas adoradoras, fue miembro y luego presidente de la Sociedad de los Misioneros de San Francisco Javier para las Misiones populares.
"Su existencia - ha dicho Sor Maria Longo, Superiora general de las Hermanas Salesianas de los Sagrados Corazones - pasó bajo el signo de la caridad y el celo apostólico. Orientado ya desde joven a la vida misionera, Filippo eligió el sacerdocio después de un dramática coincidencia: el encuentro en la iglesia de un niño sordomudo, desesperado e inconsolable en los brazos de su madre. Don Smaldone intuye que su misión debía centrarse explícitamente en los más débiles, en particular en los sordos”.
"Funda escuelas, institutos en Puglia, Campania, Lazio - continúa la Superiora general - con el objetivo de educar, formar, instruir y sobre todo evangelizar. Siguiendo la que él llama la pedagogía del amor. El primer instituto nace en Lecce en 1885, posteriormente en Barie Salerno, sólo en 1902 don Filippo adquiere el ex Monasterio de las Carmelitas descalzas, una iglesia monumental en el casco antiguo de Lecce, que se convierte en la sede de la Casa Madre". Hoy su Familia religiosa está compuesta de unas 400 religiosas presentes en cerca de cuarenta comunidades en Brasil, Moldavia, Paraguay y Rwanda además de Italia. (S.L) (Agencia Fides 12/10/2006, Líneas: 36 Palabras: 518)
