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Phnom Pen (Agencia Fides) - Un despertar de la fe, de alegría de caridad: este es el efecto de la apertura de la nueva iglesia en la aldea de Preik Sbaw, provincia de Kompong Tom, parte de la Prefectura Apostólica de Battambang. A apenas dos meses de la inauguración, que tuvo lugar a principios de agosto, la comunidad católica local vive una férvida estación en la que se multiplican los encuentros de oración y catequesis para niños, jóvenes y adultos, y crecen las iniciativas de caridad hacia los más pobres.
La nueva iglesia ha sido construida gracias a la contribución de la Santa Sede, de algunos donantes japoneses y de los fieles locales, que han dado una contribución en materiales y mano de obra, con la ayuda de algunos budistas. En la ceremonia de inauguración, el Prefecto Apostólico de Battambang, el Jesuita Mons. Enrique Figaredo, ha deseado que la nueva iglesia pueda convertirse en un centro de irradiación del mensaje de Cristo. La comunidad de la aldea ha respondido con entusiasmo que, afirman, es un testimonio vital de la fe, que engendrará nuevas conversiones.
En la pastoral ordinaria de la comunidad, se quiere dar espacio a la formación, especialmente de laicos cristianos, que puedan ponerse luego al servicio de la Iglesia local. Una de las prioridades es la instrucción humana y cristiana de los niños, está también el apostolado social, las relaciones con los creyentes de otros credos, especialmente budistas.
La Iglesia católica en Camboya es una comunidad de 30.000 fieles sobre 12 millones de habitantes. En el 2005 celebró los 450 años de presencia de la fe católica en el país, que llegó en 1555 con el primer misionero dominicano P. Gaspar De Cruz. (PA) (Agencia Fides 20/9/2006 Líneas:22 Palabras: 303)
