AMERICA/PERU - Durante la Misa por la Jornada de la paz el Cardenal Cipriani pide el alto al fuego en Oriente Medio y llama a las organizaciones caritativas a manifestar su solidaridad con los hermanos que sufren

lunes, 24 julio 2006

Lima (Agencia Fides) - El Cardenal Juan Luis Cipriani Thorne, Arzobispo de Lima y Primado de Perú, presidió ayer, domingo 23 de julio, la celebración de la Santa Misa en la Catedral de Lima, como parte de la Jornada Mundial por la Paz en Medio Oriente, convocada por el Santo Padre, Benedicto XVI. Asistieron a la celebración litúrgica diversos embajadores de los países de Oriente Medio (Palestina, Argelia, Egipto, Marruecos y Líbano) así como también representantes de la OEA, Rumania, Cuba y Nicaragua.
El Cardenal Cipriani, recordó la petición del Santo Padre de que ”cese al fuego y permitan el ingreso de la ayuda humanitaria en las zonas afectadas por el conflicto bélico”; asimismo, hizo un llamado a las organizaciones caritativas “para que manifiesten su solidaridad con nuestros hermanos que sufren”. También lamentó que normalmente a la hora de realizar una valoración se de más importancia al “tener” y se desprecie el “ser”, por lo que recordó las palabras de Juan Pablo II: El Hombre vale por lo que es y no por lo que tiene. El ser humano es mucho más importante que el tener. ”Mientras el ser no se ponga en primer lugar, ese materialismo pragmático que sólo busca el consumo y la producción, y que mide a los hombres por el dinero, hará que no haya tranquilidad”.
El Arzobispo de Lima, denunció que el ídolo del dinero estaba destrozando el mundo contemporáneo. ”Es necesario para el desarrollo humano, el poder tener una vivienda, una educación, salud, la comida, es necesario. Pero no llevemos al extremo una idea que oscurece al mundo de hoy: el tener es mejor que el ser. No, el ser está encima del tener”. “El verdadero poder - continuó el Cardenal - es el poder de ayudar a los demás, servir a los demás, escuchar a los demás, el servicio al bien común y no cuanto dinero o éxito tengas”.
Finalmente, pidió a la Virgen María,”que acompañe a las poblaciones, niños, jóvenes, ancianos y familias del Medio Oriente que hoy están viviendo una profunda tribulación, llena de sufrimiento” y de ese modo,”alcancemos de Cristo Hijo, Príncipe de la Paz, ese cese de fuego inmediato que tanto anhelamos”. (RG) (Agencia Fides 24/7/2006 Líneas: 28 palabras: 397)


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