ASIA/COREA DEL SUR - Caminar por senderos de ecumenismo, desarrollando una espiritualidad y una eclesiología de comunión: seminario sobre la unidad de los cristianos promovido por la Federación de las Conferencias Episcopales Asiáticas

viernes, 21 julio 2006

Seúl (Agencia Fides) - La vía de la unidad es una vía obligada para los cristianos de Asia, pequeña comunidad minoritaria en el continente. Es la única vía que garantiza a los fieles en Cristo un testimonio significativo, capaz de incidir en el tejido social, político y económico de las diversas naciones asiáticas, que se asoman como protagonistas sobre el escenario mundial. Lo ha afirmado el Seminario sobre el Ecumenismo, organizado conjuntamente por las Federaciones de las Conferencias Episcopales asiáticas y por el Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos en Seúl del 17 al 21 de julio de 2006.
El Seminario, que quería ofrecer una contribución a los representantes de las Conferencias Episcopales del continente asiático, se centró en el tema: “La búsqueda de la unidad de los cristianos: dónde hemos llegado hasta hoy” y ha visto la participación del Cardenal Walter Kasper.
Estaban presentes treinta y cinco Obispos, numerosos sacerdotes, religiosos y laicos en representación de Conferencias Episcopales de Asia: Bangladesh, Hong Kong, India, Indonesia, Corea, Macao, Myanmar, Filipinas, Tailandia y Vietnam.
La asamblea ha tratado de reflexionar sobre las relaciones ecuménicas en los países asiáticos, y de desarrollar eficaces acercamientos pastorales, especialmente respecto a las relaciones con el Pentecostalismo. Además las fechas del Seminario de Seúl han sido elegidas de manera que coincidan con la Conferencia Mundial Metodista, que tiene lugar en Seúl del 20 al 24 de julio y en las que está presenta el Cardenal Kasper.
Abriendo los trabajos, Mons. Hyginus Kim Hee-joong, Presidente de la Comisión para la Unidad de los Cristianos y el diálogo interreligioso, de la Conferencia Episcopal de Corea, subrayó que “la unidad es una misión importante, esencial para la Iglesia, e interpela a todos los cristianos”.
En su intervención el Cardenal Kasper subrayó que la unidad de la Iglesia “es el centro esencial de la voluntad de Dios y de la fe católica. La división, en cambio, va en contra de la voluntad de Dios y las intenciones de Cristo”. “El movimiento ecuménico - continuó - es una peregrinación común hacia la plenitud de la universalidad que Jesucristo quiere para la Iglesia . Más cercanos estamos de Cristo en este camino, más cercanos estamos los unos de los otros, con el objetivo último de ser plenamente Uno en Cristo”. El Cardenal Kasper indicó que entre las prioridades estaba desarrollar “una espiritualidad de comunión y eclesiología de comunión”.
El cardenal Stephen Kim Arzobispo de Seúl, subrayó: “Desde el Concilio Vaticano II el ecumenismo ha dado numerosos pasos hacía delante. Pero ahora necesita de cooperación y diálogo”, deseando que el seminario pudiera ser una oportunidad para reforzar vínculos.
Algunos Obispos señalaron en sus intervenciones los problemas que a veces existen, especialmente en las relaciones con las denominaciones Protestantes, invitando a los presentes a considerar a los miembros de otras comunidades no como “hermanos separados” sino como “compañeros en el diálogo”.
La reflexión continuará en el Seminario que el Pontificio Consejo está organizando para el mes de febrero de 2007 en las Filipinas. (PA) (Agencia Fides 21/7/2006 Líneas: 41 Palabras: 541)


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