AMERICA/PERU - “Debemos mirar hacia el futuro con optimismo confiando... y trabajar por la unidad, para ayudar y dirigir a nuestro país hacia el progreso y bienestar”: llamamiento de los Obispos tras las elecciones

viernes, 23 junio 2006

Lima (Agencia Fides) - “Al concluir una etapa electoral, ahora está frente a nosotros el compromiso y el reto de construir el futuro, buscar el bien común, atender responsablemente a nuestras mayorías marginadas, construir con generosidad, cultivar la sana tolerancia y buscar un diálogo fecundo de todas las fuerzas políticas y sociales. Deben quedar atrás las divisiones, las confrontaciones y todo aquello que perjudique la búsqueda del entendimiento común”: es el llamamiento que ha realizado el Consejo Permanente de la Conferencia Episcopal Peruana tras las elecciones presidenciales celebradas recientemente en el país y que el pueblo peruano “ha elegido un nuevo Presidente y un nuevo Congreso”, por medio de un Comunicado titulado “Dispuestos a dar respuesta a la Esperanza”. Los Obispos se felicitan de que la democracia del país “se vaya fortaleciendo” a la vez que piden a todos los ciudadanos para que “centren sus esfuerzos en el desarrollo y promoción de la persona humana”.
Recuerdan los Obispos una serie de puntos importantes e incuestionables en esta hora solmene del Perú, como son: “fortalecer nuestra convivencia social en base al respeto de la justicia; al compromiso inequívoco por la paz; la defensa por la vida; el respeto irrestricto de los derechos humanos y la lucha frontal contra todo aquello que afecte a nuestras Instituciones democráticas” y piden a todos los partidos políticos y de todos los grupos sociales a unir sus esfuerzos a favor de “los más necesitados del Perú y generar así una esperanza auténtica”. “La exclusión de los beneficios económicos de muchos hermanos nuestros exige una solución justa en la lucha contra la pobreza a fin de garantizar la justicia social, además de condiciones dignas para una calidad de vida”, se lee en el comunicado.
“Nos queda un camino arduo y difícil - concluyen los Obispos - pero debemos mirar hacia el futuro con optimismo confiando en el compromiso y capacidad del espíritu humano para trabajar por la unidad, para ayudar y dirigir a nuestro país hacia el progreso y bienestar”. (RG)


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