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Banda Aceh (Agencia Fides) - La pequeña comunidad católica de Aceh es su familia: el padre franciscano Ferdinando Severi, fraile menor Conventual, es misionero desde hace 37 años y desde hace 13 vive en Banda Aceh (Indonesia). Su servicio pastoral, cuenta, ha sufrido una "cesura" con el tsunami del 26 de diciembre del 2004. Cuando se habla, todo se refiere “antes del tsunami” o "después del tsunami". En la actualidad el religioso trabaja por devolver la esperanza a la población local y realiza proyectos humanitarios y sociales, junto a organizaciones como Catholic Relief Service; Caritas Germany; Caritas Austria; Caritas italiana, que construyen casas, hospitales, mercados, escuelas, mezquitas, puentes y calles, distribuyendo tiendas y víveres a la población.
El Presidente de Indonesia, Susilo Bambang Yudhoyono, ha subrayado la urgencia de la reconstrucción de las viviendas para los refugiados en Aceh. El P. Ferdinando Severi trabaja en primera persona en la construcción de casas para los fieles de la parroquia de Banda Aceh, amparados en la provincia contigua de Sumatra Utara. El fraile explica que "el tsunami ha destruido las viviendas. Ahora querríamos regresar a la parroquia en Banda Aceh para continuar su testimonio entre la población local. Nosotros católicos trabajamos por servir a la población, distribuyendo víveres y ofreciendo gratis tratamientos médicos y medicamentos en nuestra clínica, preparada inmediatamente después del acontecimiento."
El P. Severi administra directamente algunos proyectos. Lo primero quiere construir nuevas viviendas para los fieles refugiados de la parroquia, cuyas casa fueron demolidas por el tsunami. Además urge reedificar completamente 3 aldeas de leprosos que fueron barridas por la ola: Podiamat, Cot Lhee Rheng, Kuala Kerto. El fraile quiere adquirir 3 lotes de tierra para construir viviendas para los hermanos leprosos. Además es necesario continuar la obra de la clínica "Fátima", una clínica de la parroquia, que ofrece tratamientos y medicinas gratis a la población, casi musulmana en un 100%. Los fondos sirven para pagar la maquinaria y medicinas y el sueldo mensual de 3 enfermeras, un médico genérico y un dentista. El empeño también se dirige a garantizar la instrucción gratuita a las familias afectadas por el tsunami, como ocurre en la escuela católica "Ruines Dharma" de Banda Aceh, que acoge a 300 estudiantes, desde la guardería hasta el bachillerato.
Aún en una situación tan difícil, el fraile recuerda signos de esperanza para la atormentada región: en agosto del 2005 en Helsinki, Finlandia, se firmó un acuerdo que puso fin al conflicto entre el movimiento de lucha por la independencia de la Provincia de Aceh y el Gobierno central de Yakarta. Es una noticia ha provocado gran alivio y consuelo en todos. El P. Severicomenta: "El desastre natural del tsunami, que provocó la muerte de unas 220.000 personas y causó desmesuradas destrucciones, ha ayudado a acelerar el acuerdo de paz. Rebeldes y población se han decidido a reconducir una atmósfera de concordia en esta provincia de Aceh. Por ello, desde el pasado 15 de agosto no hay más enfrentamientos armados, no más secuestros, y las carreteras de comunicación son más seguras. Del mal, como siempre, Dios sabe sacar el bien. ¡Alabado sea el Señor!". (PA) (Agencia Fides 28/3/2005 Líneas: 40 Palabras: 538)
