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Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - En el 25° aniversario del restablecimiento del diaconado permanente en la Diócesis de Roma, el Santo Padre Benedicto XVI ha recibido en audiencia a los Diáconos permanentes en la mañana del sábado 19 de febrero, acompañado por el Cardenal Vicario, Camillo Ruini. "Queridos diáconos, os doy las gracias por los servicios que desarrolláis en numerosas comunidades parroquiales de Roma con gran generosidad - ha dicho el Santo Padre - dedicándoos en particular a la pastoral bautismal y familiar… Muchos de vosotros desarrollais una actividad laboral en oficinas, hospitales y escuelas: en estos entornos estáis llamados a ser servidores de la Verdad. Anunciando el Evangelio, podréis donar la Palabra capaz de iluminar y dar sentido al trabajo del hombre, al sufrimiento de los enfermos, y ayudaréis a las nuevas generaciones a descubrir la belleza de la fe cristiana. De este modo, seréis diáconos de la Verdad que libera, y llevaréis a los habitantes de esta ciudad al encuentro con Jesucristo. Para el ser humano, acoger al Redentor en la propia vida es fuente de una alegría profunda que puede otorgar la paz también en lo momentos de prueba. Sed, pues, los servidores de la Verdad para ser portadores de la alegría que Dios quiere donar a todo hombre”.
Al inicio de su discurso el Papa Benedicto XVI invitó a los Diáconos a inspirarse en su ministerio en el ejemplo de Jesús: "Es El, Cristo, el ejemplo a seguir. En el Evangelio Él ha dicho a sus discípulos que “no ha venido para ser servido sino para servir" (cfr Mt 20,28)... Para poder testimoniar realmente el amor de Dios es muy importante la unión con Cristo mediante la oración, la vida sacramental y en particular, la adoración eucarística"
El Santo Padre también ha subrayado la importancia de unir el anuncio del Evangelio al testimonio concreto de la caridad, que "pertenece desde el principio al ministerio diaconal: los siete, de que hablan los Hechos de los Apóstoles, fueron elegidos para servir a la mesa. Vosotros, que pertenecéis a la Iglesia de Roma, sois los herederos de una larga tradición, que tiene en el diácono Lorenzo una figura singularmente bella y luminosa". Hoy soy muchos los pobres, a menudo procedentes de países muy lejanos de Italia, que llaman a las puertas de las parroquias en busca de ayuda, " Acoged a estos hermanos con gran cordialidad y disponibilidad, y tratad de subsanar sus necesidades en la medida de lo posible - ha rencomendado el Papa -… Por medio de vuestro servicio también los pobres perciben que forman parte de esa gran familia de los hijos de Dios, que es la Iglesia. Queridos diáconos romanos, viviendo y testimoniando la infinita caridad de Dios, vuestro ministerio pueda estar siempre al servicio de la edificación de la Iglesia como comunión". (S.L) (Agencia Fides 20/2/2006 - Líneas: 34 Palabras: 503)
