ASIA/BANGLADESH - Los abuelos y los ancianos, un precioso acompañamiento en las familias

miércoles, 3 agosto 2022 ancianos   sociedad   jóvenes  

Gazipur (Agencia Fides) - La presencia de los abuelos y de los ancianos sigue siendo preciosa para las familias de la sociedad de Bangladesh. Sobre todo en las zonas rurales, las familias siguen unidas y los ancianos conviven con hijos y nietos. Pero debido a la progresiva urbanización, muchas familias que se han trasladado a la ciudad o al extranjero y viven sin la presencia de los abuelos. Por otro lado, muchos ancianos no pueden adaptarse a la vida en la ciudad y prefieren quedarse en los pueblos rurales. En este estado, muchos de ellos se quedan solos en los últimos años de su vida. En este marco social, la comunidad católica de Bangladesh ha celebrado recientemente el "Día de los Abuelos y los Ancianos", con el objetivo de enseñar el afecto y el amor hacia los abuelos.
En la Jornada que se celebra el 24 de julio, muchas parroquias confían a los ancianos un testimonio o un sermón para que lo pronuncien ante los fieles. Según la información de la Agencia Fides, en la comunidad de Pagar en Gazipur, cerca de Dhaka, Isidore Gomes, que es abuelo, pronunció un discurso durante la misa del domingo. "La importancia de la persona mayor es inmensa", dijo. En esta época marcada por las nuevas tecnologías y los teléfonos inteligentes, los hijos y los nietos están ocupados con sus dispositivos, lo que puede ampliar la brecha generacional. Es importante cuidar a los mayores de la familia", explicó.
Gomes, que vive con sus hijos y nietos, dijo que conoce muchos casos en los que las familias se trasladan a la ciudad y los abuelos se quedan solos en los pueblos. "Nosotros, los abuelos y los ancianos, deseamos estar con nuestros familiares", señaló. "Queremos hablar con nuestros hijos y nietos todos los días. Debido a nuestra avanzada edad, muchos de nosotros no podemos ir a la iglesia, los sacerdotes nos llevan la Eucaristía a casa, pero a veces los jóvenes no son muy dados a visitar a los ancianos y a los abuelos", dijo.
Y recordó: "Cuando era joven, dedicaba bastante tiempo a mis padres. Al conocer a muchas personas mayores, aprendí mucho de ellas", dijo expresando su gratitud. Incluso la muerte debe ser un momento de alegría, no de luto, señaló: "Debemos acoger la muerte de los ancianos como un viaje en la alegría, dando gracias por el tiempo que los tuvimos a nuestro lado. El viaje a la vida eterna será ligero y alegre para ellos si sus familiares permanecen a su lado en los últimos días de su existencia", explicó.
El presidente de la Comisión Episcopal para la Vida Familiar, Mons. Ponen Paul Kubi CSC, miembro de la Congregación de la Santa Cruz y obispo de Mymensingh, escribió en un mensaje enviado a las parroquias: "Los ancianos son miembros de nuestra familia, de la sociedad y de la Iglesia. Son importantes y la Iglesia los quiere. Esperamos que se desarrolle el diálogo y la armonía entre las nuevas generaciones y los ancianos. Como dice el Papa, "el conocimiento y la experiencia de los abuelos son preciosos para los jóvenes".
Según datos de 2019, más de 13 millones de personas que viven en Bangladesh tienen más de 60 años, el 8% de la población total del país, que es de unos 160 millones. Según estudios recientes, la mayoría de los habitantes de Bangladesh mayores de 60 años viven en zonas rurales, donde no hay servicios sanitarios y sociales adecuados y las oportunidades de empleo son limitadas. Más del 50% de los ancianos son viudos o viven solos.
(FC -PA) (Agencia Fides 3/08/2022)


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