ASIA/SRI LANKA - Crisis económica y social: la sociedad civil pide la intervención de la ONU

Colombo (Agencia Fides) – “En Sri Lanka existe una situación extremadamente crítica que, si no se aborda, podría conducir a un grave colapso del Estado y también al desarrollo de la anarquía en la sociedad en general”: así se afirma en una nota enviada a la ONU por la Asian Human Rights Commission “Comisión Asiática de Derechos Humanos - AHRC), una organización con sede en Hong Kong que lleva 40 años vigilando y promoviendo el respeto de los derechos humanos en el continente asiático.
La nota de la AHRC recibida también en la Agencia Fides señala: “Sri Lanka se enfrenta ahora al pago de la crisis vinculada a la deuda que podría ser la peor que haya experimentado en toda su historia. Muchos economistas, banqueros y personas relacionadas con el mundo empresarial, así como organizaciones sociales como los sindicatos y otras organizaciones de la sociedad civil, han expresado su más profundo temor por la evolución de la situación en el país”. “En Colombo, así como en todas las demás zonas del país - prosigue el texto - hay manifestaciones masivas que exigen una rápida solución a cuestiones urgentes como el problema del aumento constante de los precios de los productos de primera necesidad, y la reducción de la disponibilidad de suministros de electricidad, gas y otros productos esenciales”.
Mientras tanto, se señala que los exámenes escolares han sido cancelados recientemente debido a la falta de material didáctico. “Según las previsiones, esta crisis continuará a menos que haya alguna intervención creíble para conseguir el apoyo de la comunidad internacional, incluido el Fondo Monetario Internacional (FMI) y otros organismos, para reprogramar el pago de las deudas y, al mismo tiempo, es necesario también elaborar un plan integral para restaurar la estabilidad del país”.
Según la AHRC, “la crisis actual es el resultado de un periodo considerable de abandono de los principios de buen gobierno: toda la burocracia estatal se encuentra en una crisis sin precedentes debido a la centralización del poder en el sistema presidencialista. La desregulación directa de casi todos los ámbitos de la vida ha afectado, entre otros, a la administración de justicia, a las instituciones policiales, a las instituciones fiscales y al poder judicial”. Ante una crisis de esta magnitud, surge la pregunta: ¿cuál es la forma de salir de esta terrible trampa de la deuda?
La Comisión constata “el completo hundimiento de la confianza de los ciudadanos en el sistema político en su conjunto. Y esto no es el producto de un solo acto, sino el resultado de un proceso que se ha desarrollado durante un largo periodo de tiempo. Esta pérdida de credibilidad en el conjunto de la clase política ha creado desconfianza entre ésta y el conjunto de la población”.
En este contexto, se pide la intervención de las Naciones Unidas “en un papel mediador para ayudar a Sri Lanka a desarrollar planes a corto y largo plazo para la recuperación de la estabilidad en el país y también para evitar que el país caiga en una situación de anarquía”.
“Desde el punto de vista geopolítico - concluye la nota - la inestabilidad en Sri Lanka es también motivo de preocupación en la política internacional, lo que proporciona más razones para justificar el papel proactivo que podría desempeñar la ONU en estas circunstancias”.
(PA) (Agencia Fides 4/4/2022)

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