ASIA/LÍBANO - El camino sinodal “ocasión favorable” para los jóvenes cristianos de Oriente Medio

martes, 8 marzo 2022 oriente medio iglesias orientales jóvenes sinodalidad ecumenismo

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Rabieh (Agencia Fides) - Las Iglesias de Oriente Medio están llamadas a re-descubrir y reactivar su vocación sinodal a todos los niveles si quieren preservar la transmisión de la fe y de sus tradiciones apostólicas a las jóvenes generaciones en medio de las turbulencias y crisis que agitan las sociedades de Oriente Medio. Este es el mensaje que ha surgido del encuentro de jóvenes cristianos libaneses reunidos del viernes 4 al domingo 6 de marzo, para reflexionar juntos sobre cómo el camino sinodal iniciado en la Iglesia Católica puede representar una circunstancia favorable para potenciar la contribución de los jóvenes a la vida eclesial y civil en los países de Oriente Medio. El encuentro, patrocinado por la fundación Pro Oriente y por los teólogos del equipo ecuménico Nakhtar al Hayat ("Elegimos la vida"), es sólo la primera etapa de un viaje que continuará con encuentros similares programados entre abril y junio en Jordania, Palestina y Egipto. Al encuentro de Rabieh han asistido 25 jóvenes pertenecientes a diferentes Iglesias y comunidades eclesiales procedentes de distintas zonas del país. En las distintas sesiones de trabajo han participado, entre otros, la hermana Emilie Tannous, Viola Raheb (responsable local de Pro Oriente), el teólogo greco-melquita libanés Gabriel Hachem, miembro de la Comisión Teológica Internacional, y el sacerdote maronita Rouphael Zgheib, director nacional de las Obras Misionales Pontificias en el Líbano.
Durante las jornadas de estudio y reflexión compartida - informa un resumen de los trabajos, recibido en la Agencia Fides - ha quedado claro que la llamada sinodalidad no representa un modelo abstracto de funcionamiento del aparato eclesial, elaborado a imagen y semejanza de los sistemas vigentes en los organismos políticos. El Sínodo, como sugiere la raíz griega de la palabra, es un “caminar juntos”, pero en su significado eclesial el caminar es real sólo si es el Espíritu Santo quien “camina junto” a la Iglesia. Los participantes en la reunión también han extraído de la Sagrada Escritura las imágenes más adecuadas para sugerir lo que es el “camino” sinodal de la Iglesia. Imágenes como las que propone el Antiguo Testamento, con la historia de Dios acompañando al pueblo elegido en su viaje a la Tierra Prometida. O las imágenes evangélicas de Jesús caminando por las calles de Palestina, junto a sus discípulos y a las multitudes que se agolpaban a su alrededor para pedirle señales de salvación; o, de nuevo, las referencias al Espíritu Santo que, tras la resurrección de Cristo, obró maravillas “caminando” junto a los discípulos que comenzaron a confesar y a dar testimonio ante el mundo del anuncio del Evangelio, y a conducir a la Iglesia naciente hacia la plenitud del Reino de Dios.
Si el Sínodo significa “caminar juntos” en medio de las circunstancias de la historia, el debate entre los jóvenes reunidos en Rabieh ha puesto de manifiesto que el camino sinodal interpela a cada bautizado, llamado a “caminar juntos” con sus hermanos para anunciar el Evangelio en su tiempo, en las ocasiones y situaciones que marcan su vida cotidiana. Por eso, la sinodalidad es una “aventura” que debe emprenderse sólo en compañía del Espíritu Santo, escuchando y siguiendo lo que el Espíritu muestra y comunica a lo largo del camino.
La “herramienta de trabajo” de las distintas sesiones del encuentro de Rabieh ha sido el denso documento sobre la condición actual y futura de las comunidades cristianas de Oriente Medio elaborado por los teólogos del equipo ecuménico Nakhtar al Hayat (“Elegimos la vida”) a finales del pasado mes de septiembre, titulado “Los cristianos de Oriente Medio: por una renovación de las opciones teológicas, sociales y políticas” (véase Fides 28/9/2021).
“La mayoría de las Iglesias históricas de Oriente Medio", señalaban los autores del texto, "son patriarcales o sinodales. Ambos sistemas se inspiran en la idea de sinodalidad, que, en su significado original, se refiere a la comunión y al caminar juntos”. Estos rasgos tradicionales de la vida eclesial de las comunidades orientales se deben recuperar, mientras que "desgraciadamente hoy en nuestras Iglesias vemos al pueblo de Dios - especialmente a las mujeres y a los jóvenes - marginados en las decisiones importantes".
Los chicos y chicas cristianos reunidos en Rabieh han reiterado que, a pesar de todos los temores que se ciernen sobre su presente y su futuro, quieren escapar de la lógica de la “minoría asediada”. En las distintas sesiones de trabajo sean abordado los problemas y dificultades que aquejan a la condición de los jóvenes en las sociedades de Oriente Medio, incluyendo fenómenos como el debilitamiento de los vínculos con la propia comunidad de fe, el individualismo, la pérdida de la fe personal, la percepción de la propia marginalidad en relación con los procesos sociales en curso, en un marco de creciente inestabilidad política y empobrecimiento económico.
(GV) (Agencia Fides 8/3/2022)