AMÉRICA/BRASIL - “Solidaridad en acción” en las diócesis tras las inundaciones, con vistas a la reconstrucción

sábado, 8 enero 2022 catástrofes naturales   iglesias locales   obispos  

Ilhéus (Agencia Fides) - De un total de 26 municipios de la diócesis de Ilhéus, 16 se han visto afectados por las inundaciones entre diciembre y enero (véase Fides 29/12/2021). El obispo de la diócesis, Mons. Giovanni Crippa, en la información difundida por la Conferencia Episcopal (CNBB) y recibida por la Agencia Fides, subraya la solidaridad de las personas que se han organizado en torno a la Iglesia, con la ayuda de sacerdotes, diáconos y laicos comprometidos en la pastoral y los movimientos eclesiales, para llevar ayuda material y espiritual a las familias afectadas. “Esta solidaridad se ha traducido en alimentos, ropa, colchones, comidas. Ha sido un momento hermoso al ver la solidaridad en acción”, comenta el Obispo, elogiando la cercanía de los sacerdotes de la diócesis a la gente en un momento en que necesitan consuelo espiritual, porque en esta situación se ha vuelto muy difícil hacer frente a la vida y al futuro, muchos han perdido sus casas y todo lo que necesitaban para vivir.
El obispo de Itabuna, monseñor Carlos Alberto dos Santos, dice que a raíz de las inundaciones y del estado de calamidad en la región sur de Bahía, la diócesis ha acogido a personas en los salones parroquiales, ofreciéndoles tres comidas al día. “También ofrec2mos el calor de nuestros dormitorios, para que tengan un lugar tranquilo donde aliviar su situación de dolor y sufrimiento. Estamos promoviendo una campaña de amor, acogiendo a estas personas con fe, dedicación, mostrando que no están solas”.
En la diócesis de Teixeira de Freitas, cinco de sus 13 municipios se han visto terriblemente afectados por el ciclón que ha arrasado la región, según su obispo, Mons. Jailton de Oliveira Lima. En esta primera fase de la emergencia, la diócesis ha distribuido unas 22 toneladas de alimentos, ropa, colchones y agua mineral. Se ha lanzado una campaña en toda la diócesis y se ha creado un comité de sacerdotes y laicos para gestionar las iniciativas. La diócesis también ha definido cuatro lugares estratégicos en su distrito para la recogida de ropa, alimentos y productos de higiene, y artículos de primera necesidad. “Desde el principio, nosotros, como Iglesia, hemos estado disponibles para acoger a la gente de cualquier manera que pudiéramos, ayudándoles a salir de las casas inundadas, bajándolos de los tejados, llevándolos a los refugios, a los hospitales”, explica el Obispo. “Había más agua de la que había visto en mi vida”. El obispo subraya que muchas personas están acampadas en iglesias, salones parroquiales, escuelas, y no tienen ninguna perspectiva de volver a casa. Hay una fuerte presión sobre los poderes constituidos (los municipios, el gobierno del Estado de Bahía y el gobierno federal) para atender a estas personas.
En las tres diócesis del sur de Bahía se está haciendo un registro de las necesidades de los afectados, para identificar lo que se ha perdido y lo que se necesitará para la reconstrucción. El gobierno planea reconstruir las casas destruidas, pero también en zonas alejadas de donde vivían, cerca de sus lugares de trabajo, y esto crea otros problemas. El Obispo de Itabuna agradece a todas las organizaciones nacionales e internacionales que se han movilizado para el esfuerzo de ayuda, y hace un llamamiento para que la ayuda continúe.
(SL) (Agencia Fides 8/1/2022)


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