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Kinshasa (Agencia Fides) - Mientras la República Democrática del Congo se encamina hacia una nueva fase de su historia con la aprobación ya prácticamente segura de la nueva Constitución con el referendo popular del 18 de diciembre (ver Fides 19 y 21 de diciembre del 2005), las Naciones Unidas lanzan una doble señal, militar y diplomática a los grupos armados que continúan operando al este del País.
Anoche, miércoles 21 de diciembre, el Consejo de seguridad de la ONU adoptó por unanimidad una resolución (la 1649) que exige el desarme de los grupos armados que actúan en el área de los Grandes Lagos. La resolución prevé la aplicación durante un período, que vence el 31 de julio del 2006, de sanciones individuales (prohibición de viaje y congelamiento de los bienes financieros) de los responsables políticos y militares de los grupos armados "que obstaculizan el desarme, la repatriación y el restablecimiento voluntario de sus combatientes."
Entre los grupos mencionados en la resolución están las Fuerzas Democráticas de Liberación de Rwanda (FDLR, grupo que se opone al gobierno de Kigali y que tiene sus bases en el RDC), las Fuerzas Nacionales de Liberación (FNL) el último grupo de guerrilla burundés que no ha firmado todavía los acuerdos de paz y el Ejército de Resistencia del Señor (LRA) movimiento de guerrilla que actúa en el Norte de Uganda, que tiene bases en Sur Sudán y en el Noreste de la RDC.
También sufren sanciones "los responsables de las milicias congoleñas apoyadas por elementos externos a la RDC, en particular, las que operan en el distrito del Ituri" en el Noreste del País.
La resolución pide por último los a Estados confinantes con la RDC que contribuyan a la implementación del embargo sobre los suministros militares a estos grupos y a su desarme, y que pongan fin a la explotación ilegal de los recursos congoleños.
El Consejo de seguridad también ha votado una declaración en la que felicita al pueblo congoleño por "el buen desarrollo del referendo sobre el proyecto de Constitución."
En el plano militar, los Cascos Azules de la Misión de las Naciones Unidas en el Congo (MONUC) y las tropas regulares congoleñas han lanzado una ofensiva en Ituri contra las milicias que atacaron un campo militar en el área a principios de la semana. Según fuentes locales los combates habrían provocado la muerte de 6 milicianos y un soldado congoleño.
Los hombres responsables del ataque son guiados por Peter Karim, un jefe de milicia considerado responsable del ataque de junio contra un helicóptero de la ONU en el que murió un Casco Azul nepalés. (L.M) (Agencia Fides 22/12/2005 Líneas: 35 Palabras: 466)
