EUROPA/ITALIA - Un misionero italiano muere en Madagascar después de 59 años dedicado a la educación y a los pobres

miércoles, 1 julio 2020 animación misionera   misioneros   fidei donum   educación   pobreza  

Diocesi Reggio Emilia

Reggio Emilia (Agencia Fides) - “Don Pietro Ganapini es una de las figuras más singulares, quizás la más significativa, de los misioneros de Reggio que han vivido su ministerio en la segunda mitad del siglo XX y en estos primeros años del nuevo milenio. Se puede decir que toda su vida madura coincidió con la vocación misionera. Desde 1961 vivió continuamente en Madagascar donde fue enviado por voluntad del obispo Beniamino Socche. Todavía no existía el proyecto misionero que luego se manifestaría y articularía en los años posteriores al concilio”. Así lo escribe el obispo de Reggio Emilia-Guastalla, Mons. Massimo Camisasca, en la carta a la diócesis en la que anuncia el fallecimiento de don Ganapini.
El obispo recuerda: “Las escuelas que creó y dirigió son hoy un eje fundamental del débil sistema educativo del país. Las más de cien residencias escolares que, con la ayuda de los amigos de Pietro Ganapini, ha fundado en los últimos años, son el signo de una percepción incansable y lúcida del valor de la educación para el presente y el futuro de una Iglesia y de una nación. Don Pietro nos dio el testimonio de una vida misionera al servicio de los pobres, sin ninguna sombra de reducción sociológica o ideológica. Él era sencillamente un cristiano”.
A las 4 de la mañana del martes 30 de junio, falleció don Pietro Ganapini, misionero Fidei Donum de 59 años en Madagascar. Fue el pionero y decano de los misioneros de Reggio, y pasó todos los días de su vida al servicio de los más pobres, especialmente de los niños, a quienes llamaba cariñosamente “los más pobres de los pobres”, aquellos que no tenían la posibilidad de estudiar. Nació en Pantano di Carpineti el 19 de enero de 1928, recibió la ordenación sacerdotal el 13 de agosto de 1950. Después de unos años de enseñanza en el seminario, el entusiasmo por la publicación de la encíclica “Fidei Donum” lo llevó a marcharse como misionero en noviembre de 1961 a Madagascar, el primero de la diócesis de Reggio Emilia - Guastalla, abriendo el camino a muchos otros misioneros: sacerdotes, religiosas y laicos. Según su voluntad, sus restos mortales permanecerán en Madagascar. (SL) (Agencia Fides 01/07/2020)


Compartir: