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Colombo (Agencia Fides) - Después de las elecciones presidenciales, Sri Lanka atraviesa una fase de incertidumbre en el futuro del país. El nuevo presidente Mahinda Rajapakse, ha anunciado la intención de revisar el alto-el-fuego firmado en febrero del 2002 con los rebeldes del Liberation Tigers of Tamiles Eelam ("Tigres por la liberación de la patria tamil", Ltte) movimiento de guerrilla que controla el área Nordeste de la isla.
El presidente se ha manifestado disponible a coloquios directos con el Ltte para un proceso de paz "abierto y transparente", que debería prever "la prevención de actos terroristas y el reclutamiento de niños-soldado, para comprender otros aspectos."
El movimiento no ha sido bien acogida por los tamiles que han amenazado con reanudar el conflicto civil si el gobierno no formula una propuesta de acuerdo coherente y aceptable, satisfactoria para las aspiraciones de los tamiles, antes de finales del 2005.
Mientras el neo presidente de Sri Lanka ha nombrado 25 ministros de su ejecutivo, excluyendo los partidos extremistas de la mayoría, sus aliados en las elecciones. Los dos partidos extremistas, el marxista Janatha Vimukthi Peramuna (People's Liberation Front, Jvp) y el Jathika Hela Urumaya (National Heritage Party Jhu) compuesto por monjes budistas, sustentarán el nuevo gobierno, aún sin revestir ningún cargo en la trabazón.
El nuevo primer ministro es Ratnasiri Wickremanayake, de 73 años, hombre político que se ha opuesto siempre a cualquier tipo de concesión a los tamiles, y se distinguió en el pasado como defensor de una política nacionalista, de carácter cingales-budista. Wickremanayake, ex ministro de Asuntos budistas, es también el promotor del Act for the Protection of Religious Freedom, el proyecto de ley anti-conversiones, todavía no votado por el Parlamento, y fuertemente obstaculizado por las minorías religiosas y la Iglesia católica.
En Sri Lanka está vigente un sistema presidencial en el que el ejecutivo es conducido por el presidente mismo, que es jefe de estado, de gobierno y comandante en jefe de las fuerzas armadas. El presidente tiene la facultad de disolver el Parlamento. (PA) (Agencia Fides 29/11/2005 Líneas: 28 Palabras: 349)
