AFRICA/MALI - Una vez más juntos por África: la asociación con los Hermanos de San Juan de Dios para los Enfermos Lejanos y la Aeronáutico Militar vuelven a Malí para "devolver la luz" a los cerca de 2 millones de personas que corren peligro de ceguera

Roma (Agencia Fides) - Han partido el 25 de noviembre los médicos del AFMAL, la asociación con los Hermanos de San Juan de dios para los Enfermos Lejanos, y de la Aeronáutico Militar. Destino África, República de Malí, ciudad de Gao, dónde les esperan niños, jóvenes y ancianos ciegos con una esperanza: volver a ver.
La misión humanitaria tiene un objetivo bien preciso: realizar el proyecto "devolver la luz", que se propone combatir la ceguera provocada por enfermedades no curadas, de manera particular las cataratas, que en África sub-sahariana afectan a cerca de 2 millones de personas.
Una vez más juntos por África: el AFMAL y la Aeronáutico Militar en Malí, en noviembre del pasado año devolvieron la vista a 250 personas; en Benin, en junio pasado, recibierodnla visita de 800 personas y realizaron 85 intervenciones de cataratas, 150 visitas cardiológicas, 50 intervenciones de cirugía general.
Para la ocasión serán embarcados, además de material humanitario de primera necesidad, 2.000 gafas, fruto de una colecta de solidaridad promovida por una asociación de ópticos italianos. Se trata de un proyecto y de una iniciativa que ha cobrado enseguida el favor de la gente, a quien se les invitaba a recoger gafas en desuso que vienen luego registradas.
Hasta el momento, se han realizado para el proyecto "devolver la luz", cinco misiones humanitarias (dos en Malí, una en Benin, una en Bali y otra en Togo) con un total de 700 intervenciones quirúrgicas y casi 2500 visitas de ambulatorio. Resultados concretos para un proyecto que además de solucionar el problema sanitario, tiene importantes matices sociales. En estas regiones africanas, en efecto, el ciego no puede trabajar y se le asigna un "niño-guía" que hasta la mayoría de edad debe seguirlo, sacrificando en este papel su propia infancia y juventud. Gracias a estas intervenciones, no sólo muchísimos hombres y mujeres podrán volver a ver y por lo tanto, ser productivos en sus aldeas de pertenencia, sino que además muchos niños tendrán la oportunidad de recobrar la libertad de correr, jugar y poder ir al colegio. (AP) (Agencia Fides 28/11/2005; Líneas: 28 Palabras: 387)