Buenos Aires (Agencia Fides) – “Aunque en esta situación de emergencia puedan visualizarse distintas prioridades, todas atendibles, no sería razonable y justo perder de vista a nuestros hermanos y hermanas de los Pueblos Originarios, ya que, para muchas de sus comunidades, esto los golpea de un modo particular y se constituye en un eslabón más de dolor y sufrimiento, en medio de tantas postergaciones y olvidos”. Así lo escribe la Comisión de Pastoral Aborigen de la Conferencia Episcopal Argentina, en su mensaje, recibido en la Agencia Fides, en el que recuerda la celebración de la Semana de los Pueblos Indígenas, del 19 al 25 de abril.
El texto, firmado por Mons. Juan José Chaparro, Obispo de Bariloche; por Mons. Luis Scozzina, Obispo de Orán y por Mons. Ángel José Macín, Obispo de Reconquista recuerda a modo de ejemplo, “la situación de nuestros hermanos Wichi, de la zona del Chaco Salteño, donde la falta de agua (esencial para combatir el COVID – 19) es una grave emergencia crónica, de la cual todos somos responsables. A pesar de la atención de tantas urgencias, no tenemos que abandonar el compromiso por resolver este y otros flagelos”.
la Semana de los Pueblos Indígenas, se inspira en el Primer Congreso Indigenista Panamericano, realizado por primera vez en México, el 19 de abril de 1940. Considerando la necesidad de visibilizar más esta realidad, y en solidaridad con los Pueblos Originarios, se decidió extender la celebración durante una semana. Este año se hará desde el 19 al 25 de abril, y tendrá como lema “somos vida en el territorio”.
“Por otra parte, el valor del territorio vinculado a la vida lo estamos redescubriendo en este tiempo, en el cual tenemos que quedarnos en nuestras casas – se lee en el mensaje -. Para algunos, esto implica un redescubrimiento de la pertenencia a un lugar, al espacio que ocupamos, y deviene una experiencia a la saga positiva. Para otros, lamentablemente, se transforma en un problema por el hacinamiento y la falta de infraestructura básica para la vida cotidiana”.
En este sentido, la expresión “somos vida en el territorio” y, sobre todo, el testimonio de nuestros hermanos indígenas, “nos interpela proféticamente acerca del cuidado de la casa común, y del espacio que cada persona y cada comunidad necesitan para desarrollar con serenidad su vida y su cultura”. Siguiendo esta visión, todos estamos llamados a cuidar “nuestro lugar en el mundo”, y respetar y cuidar el “lugar de los demás”.
El Equipo Nacional de Pastoral Aborigen (ENDEPA), ha realizado un mapa con la presencia indígena en Argentina, mostrando la riqueza de la diversidad de más de 40 pueblos con sus culturas, lenguas y costumbres. (SL) (Agencia Fides 21/04/2020)