AFRICA/BURKINA FASO - "La gracia de la llamada viene de Dios: es Él quien ha hecho de mí lo que soy": testimonio de un religioso de los Frères Missionnaires des Campagnes de Burkina Faso que acaba de emitir los votos

martes, 4 octubre 2005

Ouadougou (Agencia Fides) - ¿Qué es la vocación religiosa? Cada sacerdote, religioso y religiosa podría responder recordando su propia experiencia de vida y de encuentro con el Señor. Se trata indudablemente de una experiencia particular y al mismo tiempo universal. Fratel Alain Tougama, que, el 20 de agosto pronunció en la Catedral de Koupéla (Burkina Faso) sus votos perpetuos en la Congregación de los Frères Missionnaires des Campagnes, ha querido conceder el siguiente testimonio de como nació su vocación religiosa. "Todo empieza como un sueño, me parece sentir de señales de llamada pero una llamada difícil de notar porque no se oye. Fue necesario dejar tiempo al tiempo, para poder ver un poco más claro. Así fue poco a poco madurado en la confianza.
Mis padres, cristianos, me han transmitido y comunicado lo que constituye el alma de la vida cristiana. Tercero de una familia de 6 hijos, crecí en esta pequeña célula donde experimenté la maduración humana y espiritual. El apostolado al que mi padre se dedicaba era el de catequista y siendo nómada, practicó el catecismo itinerante. El párroco venía con frecuencia a casa para reunirse con nosotros. El entusiasmo, simpatía y ardor de este pastor hizo que brotara en mi el germen de una vida entregada a Dios y a los hombres. Tenía la certeza de que esta generosidad y esta disponibilidad estaban al servicio de los hombres y mujeres de nuestro tiempo. Un deseo apremiante se apoderó de mí: ir al seminario de Baskouré, llegar a ser sacerdote. Pero poco después, otra idea comenzó a girar por mi cabeza: llegar a ser aviador. Sañaba ya sólo con esto.
Cuanto más grande era el sueño, más me venía el "virus" de la vocación. Me decidí pues a volver a mi proyecto anterior. Por desgracia el Seminario de Dapaong estaba cerrado. Entonces comprendí que si se cierra un camino, se abre otro. Sentí hablar de los Frères Missionnaires des Campagnes. Después de una madura reflexión decidí ir a conocerlos. Con los frailes descubrí la vida religiosa. Esta vida parecía responder mejor a mis aspiraciones más profunda. El carisma de los hermanos que se encarna en el mundo rural, el sentido de la vida fraterna y comunitaria han sido las características más importantes para mí.
Éste insistir sobre la vida religiosa, comunitaria y misionera respondía a mis deseos. entendí que esta vida, con estas tres características es una profesión de fe y servicio: es un compromiso a vivir el propio bautismo. En 1999 inicié el recorrido que me ha llevado a realizar ahora los votos perpetuos en la Congregación. Mi primera tierra de misión fue Massédéna, en Togo, dónde pude constatar que la vida fraterna es posible a pesar de nuestras diferencias. Estando en contacto con los otros hermanos comprendí que mi primera profesión es una apertura a Dios y a toda la humanidad. Los votos de pobreza, castidad, y obediencia son una elección preferencial que corresponde absolutamente a mi ser interior. La gracia de la llamada viene de Dios: es Él quien ha hecho de mí lo que soy". (L.M) (Agencia Fides 4/10/2005 Líneas: 37 Palabras: 551)


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