EUROPA/ITALIA - "El Compendio del Catecismo no debe ser noticia sólo un día, sino que debe ser la buena nueva que ilumine y guíe los días y acciones de los Pastores y fieles de todo el mundo" afirma Su Exc. Mons. Amato, Secretario de la Congregación para la Doctrina de la Fe

viernes, 30 septiembre 2005

Roma (Agencia Fides) - "Extraordinaria oportunidad de maduración de la fe y de compromiso apostólico": así ha definido el Compendio del Catecismo de la Iglesia Católica Su Exc. Mons. Angelo Amato, Secretario de la Congregación para la Doctrina de la Fe y gran protagonista de la redacción de la obra, presentada el 28 de junio de 2005 por Benedicto XVI, pero pedida ya en el 2002 por Juan Pablo II para salir al encuentro de una triple exigencia: sintético, sencillez y fidelidad doctrinal respecto al Catecismo de la Iglesia Católica.
El encuentro con Mons. Amato, organizado por el Obispo de Altamura, Mons. Mario Paciello, y organizado por la Oficina Catequística Diocesana el 26 de septiembre en el Centro Juvenil "Benedicto XIII" en Gravina, ha visto la participación de más de mil personas entre Sacerdotes, Diáconos, Catequistas y trabajadores pastorales de la Diócesis de Altamura-Gravina-Acquaviva delle Fonti, quienes han apreciado la magistral relación de Mons. Amato, su competencia teológica, su amor a la Iglesia y al Papa, de quien ha sido su primer colaborador en el Dicasterio para la Doctrina de la Fe; la presencia de Mons. Amato en nuestra Diócesis, ha hecho percibir aún más la cercanía con el Santo Padre y la exigencia de fidelidad a su elevado Magisterio.
La presentación del Compendio del Catecismo de la Iglesia Católica no ha sido la simple presentación de un bestseller en los primeros puestos entre los libros más vendidos al mundo, cuanto más bien el acercamiento a un libro que debería ser el "vademécum" en la formación de todo cristiano, "instrumento privilegiado para hacer crecer en el conocimiento y en la acogida alegre del don divino", tal como el mismo Benedicto XVI lo definió en su discurso de presentación; un instrumento destinado a no permanecer cerrado en las estanterías de nuestras bibliotecas, sino que debe ser un constante punto de referencia en la vida personal y comunitaria, en orden a la fe, a la liturgia, a la moral y a la oración cristiana. No se trata de un nuevo Catecismo, como ha subrayado en numerosas ocasiones el mismo Mons. Amato, sino de un texto que quiere despertar un renovado interés y fervor por el gran Catecismo, del que sigue la estructura, y que continua siendo el texto de base de la catequesis eclesial.
Las características del Compendio, además de ser más sintético y esencialidad, son: la forma dialogada (preguntas y respuestas) que retoma un antiguo género literario catequístico, favoreciendo la asimilación y la eventual memorización de los contenidos; la presencia de imágenes (14 en total), procedentes del rico patrimonio de la iconografía cristiana, que marcan la articulación, constituyendo una parte integrante de la enseñanza catequísticas, gracias a su valor teológico; la presencia de un Apéndice, que contiene oraciones comunes de la tradición cristiana, y algunas fórmulas de doctrina católica.
Concluyendo su presentación, Mons. Amato ha indicado en el Compendio "una concreta y acreditada ocasión de crecimiento en la fe" y un "testimonio del nuestro "sentir cum Ecclesia" "; "un instrumento indispensable para conocer nuestra fe, para dar razón de nuestra esperanza… y para aumentar el amor a Dios Trinidad, a nuestro Señor Jesús Cristo y a la Iglesia": un compromiso que representa una gran oportunidad, pero también un desafío al inicio de este tercer milenio. (D.Vincenzo Panaro) (Agencia Fides 30/9/2005, Líneas: 41 Palabras: 596)


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