AMERICA/ESTADOS UNIDOS - Carta del Arzobispo de Nueva Orleáns a todos los desplazados esparcidos por el país: “Comparto vuestros sufrimientos, os sostengo con la oración y quiero ponerme al servicio de vuestras necesidades”. El sitio de la Archidiócesis punto de referencia para mantenerse en contacto

jueves, 29 septiembre 2005

Nueva Orleáns (Agencia Fides) - “Como Arzobispo de Nueva Orleáns, amigo también desplazado comparto vuestros sufrimientos, os sostengo con la oración y quiero serviros en vuestras necesidades” afirma el Arzobispo de Nueva Orleáns, Mons. Alfred Hughes, también el despalzado a causa del huracán y que se encuentra en la actualidad acogido en la diócesis de Baton Rouge (Lousiana), en una carta dirigida a los miembros de su Archidiócesis esparcidos por todo el país. Agradece a continuación el Arzobispo a todas las diócesis que han acogido a los evacuados y en especial a Mons. Muench Obispo de Baton Rouge, diócesis que ha acogido a más de 200.000 desplazados.
“El huracán Katrina ha causado grandes sufrimientos con las enorme perdida de vidas, perdida de casas, escuelas, iglesias. Nuestra primera preocupación han sido las personas”- continua el Obispo destacando la gran labor realizada por las numerosas agencias de ayuda que han actuado. “Hemos trabajado para recuperar la actividad en el mayor numero posible de parroquias y escuelas”. Recuerda a continuación Mons. Hughes algunas de las iglesias y escuelas que ya están funcionando, factor muy importante para mantener la vida católica en esas zonas. Otras iglesias por el contrario, necesitarán grandes labores de reconstrucción.
Una de las principales dificultades, según Mons. Hughes, es poder comunicarse con todos los evacuados repartidos por los diversos Estados del país, para lo cual la diócesis ha activado un sitio Internet que ofrece continuamente información actualizada de la situación (www.archdiocese-no.org/). El Arzobispo expresa a continuación su deseo de poder estar pronto presente en la diócesis y poder atender a todos: “estamos buscando cualquier modo posible para estar pastoralmente presente en esas comunidades que ya han recuperado su actividad normal así como en las comunidades que están desplazadas” y muestra su deseo de “poder celebrar pronto una Misa en la Catedral de San Louis. Esto será un signo de resurrección de la iglesia de Nueva Orleáns”. “Estar exiliados de nuestras casas y lugares de trabajo no es fácil” concluye el Arzobispo. “Como los Judíos añoramos la vuelta a la ciudad santa. Rezo por vosotros. Os pido que recéis también por mi”. (RG) (Agencia Fides 29/9/2005 Líneas: 31 Palabras: 396)


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