AFRICA/MOZAMBIQUE - Una Nota pastoral de los Obispos en el Año de la Eucaristía, sobre la Celebración Eucarística vuelve a recordar el sentido de la auténtica inculturación y la renovación litúrgica

viernes, 23 septiembre 2005

Maputo (Agencia Fides) - "Al enviar esta Nota pastoral sobre la Celebración Eucarística, hacemos nuestros las palabras de los Discípulos de Emaús que invitaron al Señor a quedarse con ellos, las mismas palabras con la que el Papa Juan Pablo II comienza la Carta Apostólica con motivo del Año de la Eucaristía: "¡Quédate con nosotros, Señor!". Los Obispos de Mozambique comienzan la Nota pastoral sobre la Celebración Eucarística publicada en este Año de la Eucaristía, dirigiendo a todos los fieles mozambiqueños y recordando la Carta Apostólica "Mane Nobiscum Domine”, subrayando que "el gran Misterio de la Eucaristía debe ser ante todo bien celebrado. Es necesario que la Santa Misa constituya el centro de la vida cristiana, y que en cada comunidad se haga todo lo posible para celebrarla decentemente, según las normas establecidas, con la participación del pueblo, valiéndose de los distintos ministros en el ejercicio de las tareas por ellos previstos, y con una seria atención también al aspecto del carácter sagrado que caracteriza el canto y la música litúrgica." (Mane Nobiscum Domine, 17).
Después del Concilio Ecuménico Vaticano II, los Obispos recuerdan que las celebraciones litúrgicas en Mozambique han tenido nuevo impulso, una participación más activa y experimentada, y han comenzado un camino de adaptación e inculturación litúrgica. Cómo responsables de la Liturgia, también subrayan su responsabilidad de Pastores en seguir con atención este crecimiento, para que de la renovación de la liturgia surga el crecimiento en la fe de las comunidades cristianas. Por desgracia, los Obispos también lamentan, en todas las diócesis, casos de abusos litúrgicos de sacerdotes y laicos, erradas interpretaciones de la creatividad y adaptación, que son causa de sufrimiento para muchos. Tales abusos y arbitrariedades se dan en las celebraciones litúrgicas, en el empleo de los vestiduras litúrgicas, en la danza litúrgica, en el ejercicio de los ministerios, en la pérdida del sentido de lo sagrado, en la introducción de cantos privados de auténtico sentido litúrgico, en el ignorar las normas emanadas. La Nota de los Obispos de Mozambique, se publica después de un trabajo de análisis y estudio que ha durado algunos años y tiene como fin "animar todos los esfuerzos que se realizarán para que los principios de la renovación litúrgica sigan siendo debidamente aplicados y experimentados en nuestras Diócesis y para que haya belleza y unidad conmemorativa en todos los actos de culto."
La Nota continúa con algunos aspectos de las adaptaciones e inculturación: lo que se puede adaptar e inculturar partiendo del Rito Romano y teniendo en consideración la cultura mozambiqueña; la traducción de los textos litúrgicos, que exige competencia teológico-litúrgica, conocimiento de la lengua del texto original y de la lengua a la que se debe traducir; la música y el canto, elementos esenciales en la celebración litúrgica, que deben estar conformes al misterio celebrado; los gestos y las actitudes del cuerpo, que tienen que contribuir a devolver la liturgia bonita y resplandeciente por sencillez, expresando el sentido propio de la liturgia, conforme a la sensibilidad cultural de la región, sin ser exagerados; el empleo de las vestiduras litúrgicas que deben seguir las normas establecidas, tanto para los presbiterios como para todos los que desarrollan algún ministerio. Por último, se corrobora que las Autoridades competentes para aprobar las adaptaciones son la Conferencia Episcopal y el Obispo en lo que concierne a su Diócesis.
En la tercera parte de la Nota son presentadas las novedades contenidas en la nueva Instrucción General del Misal Romano concerniente a la Misa, a lo que hay que preparar, a las actitudes de los fieles… En la conclusión, los Obispos agradecen a cuantos trabajan para hacer la liturgia más viva, bella y participada. "Las Comunidades cristianas crecerán con la celebración litúrgica de la Misa y con la celebración de la liturgia de la Palabra de Dios". Este trabajo es sin duda ingente y requiere la fuerza del Espíritu y la colaboración de todos, pero la Iglesia de Mozambique no puede echarse atrás en el largo del camino de renovación e inculturación litúrgico, "para alcanzar la meta que Dios le ha dado, la celebración de la Liturgia del Cielo". (S.L) (Agencia Fides 23/9/2005, Líneas: 50 Palabras: 714)


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