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Adaba (Agencia Fides) – “Ha pasado más de un año desde que comenzó mi servicio como 'fidei donum' en la Iglesia de Robe en Etiopía, así que he pensado que podría contaros los progresos realizados”, escribe a la Agencia Fides el P. Giuseppe Ghirelli, actualmente en la Misión Católica de Adaba, en el West Arsi, Oromia (véase Fides 11/12/2014). “Estoy bien - continúa el sacerdote - encantado de dedicarme a esta población, estoy aprendiendo la lengua Oromo y puedo decir ya un par de frases. Cuando la gente me oye hablar en Oromo, se ríe, me dicen que es por la sorpresa, pero yo creo que es también porque tengo que hacer reír por fuerza de como hablo torpemente esta nueva lengua. El trabajo más duro es el de entrar en una nueva cultura, entender la mentalidad de la gente, estar cerca de la gente, dejando de lado nuestros patrones y prejuicios que inevitablemente nos acompañan.
Cuando celebro la misa con mis pocos cristianos, mientras los miro, pienso en lo que podía hacer y organizar para ellos, pero luego, de inmediato, se abre paso la idea de que lo primero que debo hacer es sólo estar aquí, estar con ellos, para hacer presente a Jesús entre estas personas pobres que luchan, trabajando duro, que se esfuerzan por salir adelante, con la esperanza de mejorar su situación. En ellos hay un gran deseo de “sobrevivir” en medio de enormes dificultades. ¡Tendríais que ver lo felices que son cuando voy a visitarlos en sus casas y consigo decir algunas palabras en su idioma! Yo, que en muchos aspectos me siento afortunado, trato de estar cerca de ellos, con esperanza para que ellos, al encontrar a Jesús y creer en él, como me pasó a mí, puedan dar dirección y perspectiva a su existencia. Esto es lo que quiero: Hacer presente a Jesús con mi vida, para darlo a conocer, leer el Evangelio con ellos, caminando juntos, para entender dónde se encuentra la fuerza para seguir y ayudarles a experimentar cómo la palabra y el ejemplo de Jesús puede dar la fuerza y la esperanza en medio de los muchos problemas que experimentan en sus vidas.
¿Seré capaz de hacer esto? ¿Lo lograre? En mis andanzas de una parroquia a otra a menudo pienso en las muchas personas que me encuentro en el camino, muchas mujeres con sus cargas sobre sus hombros y muchos niños que pastan vacas u ovejas. ¿Cómo viven? ¿Cómo están sus casas? ¿Qué es lo que comen? ¿Van a la escuela? ¿Tienen los padres? ¿Hay alguien que piensa en ellos? ¿Son cristianos? ¿conocen a Jesús? Me hago un montón de preguntas y rezo por todas estas situaciones. En mi parroquia me hago las mismas preguntas, pero con respecto a personas que conozco directamente. Espero poder ayudar a algunos de ellos a tener un futuro más seguro. Estoy en una zona de mayoría musulmana donde los católicos son una pequeña minoría, no hay mucho trabajo pastoral como se hace en Italia, pero hay si que hay mucho trabajo en el estar presente, estar cerca, aprender, compartir sus vidas, ayudarles a tener alguna posibilidad en su difícil existencia y en todo esto, dejarse guiar por el ejemplo de Jesús. Naagaa_pace” dice para terminar don José. (GG/AP) (Agencia Fides 21/09/2015)
