AFRICA/SUDAN - Después de la sequía del año pasado, las violentas lluvias ponen en peligro la alimentación de las poblaciones del sur Sudán. Testimonio a Fides del Obispo de El Obeid

jueves, 2 junio 2005

Jartum (Agencia Fides) - "No es que falte el agua. El problema es más bien lo contrario, que ha llegado demasiado y en breve tiempo. El terreno no tiene tiempo de absorberla toda y paradójicamente se queda seco". Así describe Mons. Macram Max Gassis Obispo de El Obeid a la Agencia Fides la situación agrícola al sur de Sudán después de la alarma lanzada por las organizaciones humanitarias que trabajan en la región.
Según las agencias humanitarias el sur Sudán deberá afrontar a corto plazo una grave penuria alimenticia causada por las condiciones meteorológicas, por el masivo retorno de los refugiados internos y por las dificultades que encuentran las organizaciones internacionales a encontrar recursos para enviar ayudas a la región.
“De todas formas todavía no se comprende bien la situación” dice Mons. Gassis. "Esperamos en efecto las próximas lluvias, con la esperanza de que sean abundantes pero también regulares permitiendo así al terreno que absorba el agua de modo gradual, de modo que pueda prepararse eficazmente para la siembra."
“El pasado año hubo una fuerte sequía que afectó a las cosechas y por tanto las poblaciones locales ya están sufriendo" continúa el Obispo. "Por este motivo, como Iglesia católica trabajamos fuertemente para llevar ayudas a la población. Gracias a que ha vuelto la paz hemos podido organizar un convoy de 8 camiones que desde Kenia llegaron hasta Rumbek, "capital" del Sur Sudán. Cada camión transportaba 15-18 toneladas de comida. El convoy tardó 18 días en llegar a su destino. En otras ocasiones hemos alquilado aviones, que son más rápidos, pero además de ser más caros, sólo transportan 7 toneladas cada vez."
Mons. Gassis recuerda que "durante los 20 largos años de guerra civil, la Iglesia católica sufrió grandes lutos y daños materiales. Pero nunca hemos perdido la esperanza. Ahora que se ha firmado el acuerdo de paz, estamos reconstruyendo las iglesias y las misiones destrozadas. Por ejemplo, en Mayen Abun, una misión comboniana que sufrió graves daños, estamos reconstruyendo la casa misionera y la escuela. Hemos enviado a la misión un sacerdote y 5 voluntarios americanos. La organización no gubernamental católica Goal, está además, proveyendo a la reestructuración de los edificios. Una de las prioridades es formar profesores para retomar las lecciones."
La sangrienta guerra del sur de Sudán estalló en 1983 y causó al menos 2 millones de muertos y un número todavía mayor de prófugos. En el 2004 e alcanzó un acuerdo de paz que se espera contribuya a dar una auténtica esperanza a la población local. (L.M) (Agencia Fides 2/6/2005 Líneas: 33 Palabras: 450)


Compartir: