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Ciudad del Vaticano (Agencia Fides) - " El Salmo 115, en el original hebreo, forma parte de una sola composición junto al salmo precedente, el 114. Ambos, constituyen una acción de gracias unitaria, dirigida al Señor que libera de la pesadilla de la muerte. En nuestro texto aparece la memoria de un pasado angustiante: el orante ha mantenido alta la llama de la fe, incluso cuando en sus labios surgía la amargura de la desesperación y de la infelicidad. Alrededor se elevaba como una cortina helada de odio y de engaño, pues el prójimo se demostraba falso e infiel. Ahora, sin embargo, la súplica se transforma en gratitud, pues el Señor ha sacado a su fiel del torbellino oscuro de la mentira". En la catequesis durante la audiencia general de esta mañana en la plaza de San Pedro, el Santo Padre Benedicto XVI ha comentado el Salmo 115 - Acción de gracias en el templo - Primeras Vísperas del domingo de la III semana (Lectura: Cf. Sal 115,10-13.18-19).
El orante se dispone a ofrecer un sacrificio de acción de gracias durante una Liturgia: "en efecto se hace referencia explícitamente a la asamblea de «de todo el pueblo», ante la cual el orante cumple su voto y testimonia su fe. En esta circunstancia hará pública su acción de gracias, consciente de que incluso cuando se acerca la muerte, el Señor se inclina sobre él con amor. Dios no es indiferente al drama de su criatura, sino que rompe sus cadenas". Por ello, el orante salvado de la muerte se siente "siervo" del Señor, "hijo de su esclava", perteneciente a la casa de Dios. El Salmo termina evocando de nuevo el rito de acción de gracias que será celebrado en el marco del templo: "Su vicisitud personal es narrada para que sirva de estímulo para todos a creer y a amar al Señor. En el fondo, por tanto, podemos vislumbrar a todo el pueblo de Dios, mientras da gracias al Señor de la vida, que no abandona al justo en el seno oscuro del dolor y de la muerte, sino que le conduce a la esperanza y a la vida"
Saludando los peregrinos en las diversas lenguas, el Santo Padre Benedicto XVI ha recordado que a las 19horas de mañana, solemnidad del Corpus Christi, presidirá en la Basílica de San Juan de Letrán la Misa, a la que seguirá la tradicional procesión hasta Santa Maria La Mayor: "Invito a todos a participar en gran número en esta celebración, para expresar juntos la fe en Cristo, presente en el Eucaristía."
Al término de la Audiencia, el Papa se ha reunido con S.E. el Sr. Blaise Compaoré, Presidente de Burkina Faso, su consorte y el séquito; S.E el Sr. Amadou Toumani Toure, Presidente de la República de Malí y séquito; S.E el Sr. Absalom Themaba Dlamini, Primer Ministro del Reino de Swazilandia, su consorte y séquito. (S.L) (Agencia Fides 25/5/2005, Líneas: 34 palabras: 527)
