Organo de informacion de las Obras Misionales Pontificias desde 1927
Roma (Agencia Fides) - Los jóvenes son el futuro de la Iglesia y de Rwanda. Tenemos que apuntar sobre ellos si queremos curar las heridas del pasado". Así describe a la Agencia Fides Mons. Alexis Habiyambere, S.I. Obispo de Nyundo y Presidente de la Conferencia Episcopal de Rwanda, las perspectivas de la Iglesia en Rwanda a 11 años del genocidio de 1994. Los Obispos del Rwanda se encuentran en Roma para la visita ad limina.
"Tenemos delante las trágicas experiencias del holocausto nazi o el genocidio armenio que nos enseñan que 11 años son realmente pocos para superar el trauma del genocidio de Rwanda. Pero estos años pero no han pasado en vano y se han realizado progresos en la reconciliación nacional" dice el Obispo.
"No se puede olvidar naturalmente lo que ha sucedido y debe hacerse justicia" continua Mons. Habiyambere. Por este motivo, el gobierno rwandés ha confiado el juicio de las personas implicado en los hechos de 1994 a los tribunales tradicionales Gacaca. Según el Obispo, “los tribunales Gacaca son el único sistema para poder juzgar a millares de personas acusadas de estar implicadas, a diversos niveles, en la organización del genocidio. Seguir los procedimientos de la justicia ordinario" continua Mons. Habiyambere "comportaría tiempos largos y de hecho es una solución impracticable. Hay que tener en cuenta del hecho de que todavía hay millares de personas en la cárcel acusadas de genocidio en espera de juicio. Entre ellos también hay algunos inocentes, mientras que otros que son por el contrario culpables, están todavía libres".
El Obispo describe así el funcionamiento de los tribunales: "El procedimiento de los tribunales comunitarios es sencillo: las personas se presentan ante la propia comunidad y son juzgadas. Existe la posibilidad de realizar una confesión plena a cambio de la clemencia de la Corte. El primer deber es hacer que salga la verdad: de quién y como fue organizado el genocidio. Y después verificar la responsabilidad de cada uno. Muchas de las personas reconocidas culpables por los tribunales Gacaca son condenados a realizar trabajos socialmente útiles como pueden ser la construcción de carreteras, escuelas y hospitales."
"La Iglesia trabaja fuertemente en el proceso de reconciliación nacional. En particular, la Comisión Justicia y Paz desarrolla un papel muy importante, y a nivel formativo, las escuelas católicas desarrollan una valiosa función para educar a las nuevas generaciones en el respeto y el amor a los otros. Los movimientos de la juventud católica desarrollan una tarea de unión y formación de niños y jóvenes de todas las etnias" dice el Presidente de la Conferencia Episcopal Ruandesa.
Sobre las perspectivas futuras de la Iglesia Mons. Habiyambere afirma "La Iglesia ruandesa es una realidad viva. Los hechos de 1994 no marcaron el fin de la espiritualidad de la población local, como algunos comentadores pronosticaron, sino más bien la reforzaron. La mayor parte del clero y de los religiosos son rwandeses y hemos tenido un aumento de vocaciones. ¡Nuestro problema es el de los seminarios llenos que deben ser ampliados y no al contrario!" "En este contexto la presencia de los misioneros continua siendo importante en el ámbito sanitario y educativo" continúa el Obispo. "La fuerte petición de espiritualidad de los rwandeses está también en la base de la difusión de las sectas, que ofrecen un mensaje más fácil de comprender que el cristiano y a menudo se reducen a compromisos en el plano moral. Pero esto es un problema que no concierne sólo a Rwanda sino a todo África y también a tantas otras partes del mundo" concluye el Obispo. (L.M) (Agencia Fides 19/5/2005 Líneas: 45 Palabras: 613)
