AMERICA/ECUADOR - La grave situación puede degenerar en la anarquía, en la dictadura o en el enfrentamiento entre hermanos de una misma nación: preocupado llamamiento de los Obispos "Por la Constitución y por la patria"

Quito (Agencia Fides) - La Conferencia Episcopal del Ecuador (CEE), frente a la precipitación del de la ya difícil situación del País a causa de la disolución del Tribunal Supremo de Justicia por parte del Presidente del Ecuador, Lucio Gutiérrez, han publicado una declaración titulada "Por la Constitución y por la Patria", fechada el 16 de abril, en la que expresan su firme condena por el "maltrato de la Constitución y la división de las funciones del poder público, como abierto atentado a las bases mismas de la democracia". Los Obispos opinan que a los errores y a las violencias no se puede responder con otros errores y otras violencias y llaman la atención sobre el hecho de que la situación a la que ha llegado el país puede degenerar fácilmente en la anarquía, en la dictadura y en enfrentamientos no necesarios entre hermanos de la misma nación."
La CEE, renovando la plena disponibilidad a contribuir en todo lo que sea posible para favorecer el diálogo y la paz, pide a todas las fuerzas sociales y políticas que lleguen un acuerdo pacífico, lejos de las ocasiones que son semilla de violencia social. Al solicitar la colaboración inteligente y la buena voluntad de todos para salvar a la nación, los Obispos recuerdan que "es hora de pensar en el bien de la Patria, venido a menos por la insana prepotencia de intereses de grupos o partidos."
La grave crisis jurídico-política que afecta al Ecuador comenzó el 8 de diciembre pasado, cuando el Congreso Nacional, asociado por disposición del ejecutivo, declaró caído el Tribunal Supremo de Justicia (CSJ) y nombró una nueva Corte, profundamente reestructurada. La situación se ha agudizado recientemente, debido a la declaración del estado de emergencia en la capital, Quito, por el Presidente Gutiérrez. Después de las protestas en la calle la tarde del sábado 16 de abril, el Jefe del Estado ha revocado el estado de emergencia, pero esta medida no ha calmado los ánimos en la capital, dónde más bien se han intensificado las peticiones de su dimisión y de toda la clase gubernativa por diferentes sectores (sociales, políticos y económicos) del país, que quieren que el Ecuador vuelva al Estado de Derecho. (R.Z) (Agencia Fides 18/4/2005; Líneas: 28 Palabras: 401)