AMERICA/BRASIL - El don "especial" de Juan Pablo II a la Infancia Misionera

martes, 12 abril 2005

Brasilia (Agencia Fides) - En el año 2003, con ocasión del 160° aniversario de fundación de la Pontificia Obra de la Infancia Misionera (POIM), el Santo Padre Juan Pablo II no dejó pasar esta solemnidad sin enviar un Mensaje especial. Después de haber recordado brevemente la historia, los objetivos y la presencia en la mayor parte de los países del mundo, el Papa delineó el ideal de la obra en nuestros días: "La infancia Misionera propone a los niños de todas las diócesis del mundo un programa, que tiene como fundamento la oración, el sacrificio y gestos de solidaridad concretos: de este modo ellos pueden llegar a ser evangelizadores de sus coetáneos". Manifiestó además palabras de aprecio por sus "gestos de concreta solidaridad” y los animó fuertemente en este compromiso: "Queridos chicos misioneros, se con cuanta atención y generosidad tratáis de llevar adelante este compromiso apostólico. Os esforzáis de tantos modos para compartir la suerte de los niños obligados a trabajar y para socorrer la indigencia de los pobres; solidarizaos con las ansias y con los dramas de los niños a los que los adultos obligan a participar en las guerras, quedando ya a menudo marcados por la violencia bélica; rezad todos los días para que el don de la fe, que vosotros habéis recibido, llegue también a miles de vuestros pequeños amigos que todavía no conocen a Jesús."
En el discurso pronunciado en el ángelus del 6 de enero del 2005, el Santo Padre, elevando su oración por las pequeñas víctimas del maremoto en Asia, y recordando a los niños víctimas del hambre y las enfermedades, de la guerra y del terrorismo, así como los niños secuestrados, desaparecidos o explotados por tráficos innobles, agradeció a cuántos trabajan por la tutela de los más pequeños, y de modo especial agradeció a la Pontificia Obra de la Santa Infancia.
Este recuerdo especial de Su Santidad por la obra de la Infancia Misionera se ha convertido en un don precioso. "La infancia Misionera de Brasil se ha sentido fortalecida por sus palabras y se esfuerza cada día por llevarlo a la práctica atendiendo la formación de los Animadores, produciendo material actualizado, promoviendo encuentros de formación a todos los niveles", afirman el p. Daniele Lagni, Director Nacional de las Obras Misionales Pontificias del Brasil y el p. Savio Corinaldesi, Secretario Nacional de la Infancia Misionera, en una nota enviada a Fides. "La infancia Misionera del Brasil está profundamente agradecida a este hombre que Dios ha puesto en nuestro camino". (R.Z) (Agencia Fides 12/4/2005; Líneas: 30 Palabras: 429)


Compartir: