Organo de informacion de las Obras Misionales Pontificias desde 1927
Monterrey (Agencia Fides) – “La familia santuario de la vida, buena nueva para el Tercer milenio” es el tema central de la LXXV Asamblea plenaria del Episcopado Mexicano que se ha reunido del 28 de abril al 2 de mayo en Monterrey, México. Al termino de los trabajos los Obispos han publicado un “Mensaje a las Familias Mexicanas” en el que constatan con pesar que muchas familias se están desintegrando, trazando algunas líneas de acción pastoral.
Las causas de esta difícil situación –afirman los Obispos – están sobre todo en la desvalorización del sacramento del Matrimonio que ha llevado a considerarlo como un simple contrato privado y por tanto, que se puede deshacer libremente. Entre los otros motivos de esta crisis se encuentra la banalización de la sexualidad, reducida a un simple medio de placer que instrumentaliza a las personas; el recurso a la anticoncepción, aborto etc... para evitar la concepción del hijo o, por otro lado, el recurso a la procreación y a la manipulación asistida con el fin de tener un hijo “ a medida” esto es, cuando se quiere y como se quiere. “Dios ha querido que la familia sea el santuario de la vida” –afirman los Obispos – y por tanto, toda forma de manipulación tanto para evitar los hijos como para procrearlos a través de medios no naturales es de particular gravedad.
Los Obispos subrayan que “La pobreza, la miseria y la falta de medios adecuados de salud son una violencia a la que se ven sometidas nuestras familias, provocando el doloroso fenómeno de la migración, que repercute directamente en la desintegración familiar”. Ante estas y otras situaciones que afectan a las familias, el Episcopado mexicano alza su voz para decir con fuerza: “¡Basta! a toda destrucción de nuestras familias .... La familia, es uno de los bienes más preciosos de la humanidad Si llegáramos a perderla, nos privaríamos de la célula vital de la sociedad, pues ella es formadora de las personas y comunidad fundamental sobre la que se apoya el conjunto de las relaciones sociales”.
El mensaje concluye reafirmando el compromiso de la Iglesia a favor de la familia: “La familia es la prioridad básica de nuestra pastoral para que sea santuario de la vida, se promueva la paternidad y maternidad responsables a la luz del Magisterio, se reactive en todas las comunidades la catequesis familiar, se forme oportunamente a los jóvenes para la vida matrimonial y familiar, se acompañe y ayude a los esposos a fortalecer su relación matrimonial y se acoja con amor a las familias que atraviesan por una situación difícil y se acompañe a las personas que se encuentran en situación irregular”.
En tal perspectiva los Obispos lanzaron un llamamiento a los sacerdotes, consagrados y laicos para que se comprometan con valentía y audacia en anunciar, celebrar y servir al Evangelio del matrimonio, de la familia y de la vida en espíritu de comunión. Conscientes además de la escasa información sobre estos temas, los Obispos se comprometen a promover la formación de trabajadores pastorales. Exhorta a las entidades educativas (universidad, escuelas) y a los maestros católicos a educar a los alumnos en la recta conciencia moral en temas como la sexualidad, matrimonio, familia y vida y a comprometerse en la investigación científica en comunión y fidelidad con el Magisterio de la Iglesia. Por último piden a los medios de comunicación que trabajen conjuntamente para el respeto y la promoción del matrimonio, de la familia y de la vida; y solicitan a los gobernadores y legisladores a promulgar leyes que promuevan y defiendan los derechos de la familia y la dignidad del ser humano.(R.Z.) (Agencia Fides 6/5/2003 Líneas: 46 Palabras: 632)
