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Banda Aceh (Agencia Fides) - "La paz es posible si ambas formaciones (el gobierno y los rebeldes) se dieran cuenta del sufrimiento de la gente": ha dicho en un coloquio con la Agencia Fides el Jesuita p. Ignazio Ismartono, responsable del "Servicio de Crisis y Reconciliación" de la Conferencia Episcopal Indonesia. El P. Ismartono ha sido durante años responsable de la Comisión para el Diálogo Interreligioso y es persona de grandes capacidades de mediación y diálogo. En años pasados se reunió junto con los líderes musulmanes indonesios con el Santo Padre, dando un testimonio de apertura y amistad con el Islam moderado. Actualmente, su trabajo se centra en la provincia de Aceh, dónde desde hace meses trata de trabajar por la reconciliación entre los rebeldes y el gobierno de Yakarta e intenta afrontar la situación social del post-tsunami.
El P. Ismartono cuenta en exclusiva a Fides la situación en la atormentada provincia. "Después del tsunami, distinguimos la situación en tres fases: emergencia, rehabilitación y reconstrucción. Ahora estamos encaminándonos hacia la segunda fase, la de la gradual rehabilitación. Pero sobre la reconstrucción, hay una tensión latente. Por un lado, la sociedad civil, los intelectuales, los grupos a favor de los derechos humanos desean construir un nuevo Aceh, en el que se respeten los derechos humanos, haya paz, libertad y democracia. Por otro lado, hay otros poderes que tienen interés en perpetrar en Aceh el estado de emergencia civil, como antes del tsunami. Con el aumento de la violencia y gran sufrimiento para la población."
El P. Ismartono explica a Fides los mayores obstáculos a los que deben hacer frente las organizaciones internacionales católicas en esta fase: "Lo que falta es una coordinación general para una acción común. A veces las organizaciones se centran más en la burocracia que en las funciones. Actuando así, todo procede mucho más lentamente. Por el contrarío, sería necesario conocer y comprender bien la situación local, evitando dar ayudas por medio de canales equivocados, los que no son bien aceptados por la gente. Algunas organizaciones caritativas en Aceh han sido etiquetadas como 'instrumentos en manos del ejército' o son acusadas de hacer proselitismo. Nuestro "Servicio de crisis y reconciliación", instituido por la Conferencia Episcopal, utiliza donaciones de los católicos y trabaja en sintonía con los musulmanes locales."
La obra de asistencia, señala el p. Ismartono, afecta a las relaciones interreligiosas: "Por lo que concierne a las relaciones interreligiosas, lo que ocurre en el campo y que he experimentado es diferente de las voces alarmantes que a veces veo sobre los periódicos, sobre las amenazas de grupos fundamentalistas islámicos. Aquí los líderes religiosos católicos y musulmanes están preparando un proyecto común para reconstruir las viviendas dañadas por el tsunami. Musulmanes y cristianos están trabajando juntos, muchos son estudiantes universitarios supervivientes. Estoy buscando becas para ellos: espero encontrar quien les ayude en Europa y en todo el mundo para permitir a estos jóvenes de buena voluntad seguir estudiando y continuar el camino de su formación, en los valores de libertad, justicia, tolerancia y respeto del prójimo".
(PA) (Agencia Fides 22/2/2005 Líneas: 39 Palabras: 541)
