ASIA/JAPÓN - "Toda la Iglesia saca grandes beneficios de la Jornada Mundial de la Juventud", dice a Fides el Obispo de Takamatsu - Los jóvenes católicos japoneses se preparan para el gran encuentro en Alemania de la Iglesia universal en agosto

lunes, 7 febrero 2005

Tokio (Agencia Fides) - Para muchos jóvenes católicos japoneses la preparación para la próxima Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) del 2005 en Colonia (Alemania) del 9 al 25 de agosto, ya comenzó en el 2002. Pero según Mons. Okada Takeo Arzobispo de Tokio, encargado de la JMJ de la Conferencia Episcopal del Japón, la inscripción de los participantes comenzó el pasado mes de octubre con encuentros informativos en parroquias en todo el país. La JMJ del 2005 celebra la XX Jornada: la primera se celebró en Roma en 1984.
"Toda nuestra Iglesia en Japón ha sacado gran beneficio de la Jornada Mundial de la Juventud", ha dicho a Fides Mons. Mizobe Osamu obispo de Takamatsu. "Después del encuentro del 2002 en Toronto (Canadá), los jóvenes de Sendai (diócesis de la que entonces era Obispo Mons. Mizobe) pusieron en marcha por si solos diversas iniciativas para promover la animación y el espíritu de misión", ha dicho. "Su espíritu de entusiasmo ha sido como un detonador y ha esparcido vitalidad y amor en toda la Iglesia local."
Durante una reciente sesión preparatoria dos jóvenes participantes en la JMJ en Toronto contaron su experiencia. Uda Ai, de 22 años, de la iglesia de Matsugicho en Fukushima, recibio el bautismo cuando era estudiante en el instituto. La chica ha dicho que fue a Toronto sólo por curiosidad, para "ver", pero que precisamente lo que vio le ayudó a profundizar en su fe: "Dios existe verdaderamente. Lo entendí en lo profundo de mi ser mientras bailabas o caminaba por la calle. Dios está dentro de nosotros. Esta certeza no la había advertido nunca antes, en Japón. También me he dado cuenta de que formo parte de la Iglesia universal."
Sato Aya, de 21años, de la iglesia de Kita Sendai, ha dicho a sus coetáneos en el encuentro preparatorio que fue bautizada deniña pero que luego dejó de frecuentar la parroquia. "Pero durante la JMJ me di cuenta de que cada uno de nosotros tiene un papel en la Iglesia y esto da un sentido a la vida", dijo a los jóvenes presentes. Ahora Sato Aya es una catequista en la parroquia, y enseña la fe a un grupo de niños cada domingo. Para divulgar información sobre como participar en la próxima Jornada Mundial de la Juventud la Conferencia Episcopal del Japón ha preparado una dirección de correo electrónico especial: wyd@cbcj.catholic.jp.
(PS) (Agencia Fides 7/2/2005 Líneas: 30 Palabras: 437)


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