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Ulaan Baatar (Agencia Fides) - Una celebración Eucarística, actividades y fiestas de los jóvenes, con gran implicación también de jóvenes no cristianos: la pequeña comunidad católica de Mongolia ha vivido la festividad de San Juan Bosco como una oportunidad de fiesta, de anuncio y de testimonio.
Según han contado a Fides representantes de la iglesia local, el día del 31 de enero, en el que la Iglesia celebra la festividad de San Juan Bosco, fue el culmen de un intenso trabajo de preparación que ha implicado a los católicos en Mongolia a nivel espiritual y organizativo, y se registró una férvida actividad en la misión Salesiana en Mongolia. En particular los nueve días anteriores a la fiesta estuvieron dedicados a redescubrir y profundizar en el mensaje de San Juan Bosco para comprender cada vez mejor lo que su figura y su espiritualidad pueden significar hoy para los jóvenes de Mongolia. Naturalmente todo ha sido realizado en la modalidad típica del testimonio Salesiano, enriquecida con danzas, poesías, dibujos, centrados en la figura de Don Bosco, que han dejado a los jóvenes las formas expresivas más conformes con su sensibilidad y creatividad.
En la actividad y en la preparación en la descripción de la figura del Santo, también han sido participado jóvenes no cristianos. La mañana del 31 de enero, según comunica la agencia salesiana Ans, se celebró una misa con los jóvenes, profesores, voluntarios y misioneros de otras congregaciones. Después de la misa, algunos jóvenes del Centro juvenil presentaron algunas piezas teatrales sobre la vida de Don Bosco, seguido de juegos, y de la proyección de una película.
En Mongolia el anuncio cristiano ha vuelto a florecer después de años de oscuridad, marcados por el dominio opresivo de la ideología comunista. Hoy la pequeña grey de la comunidad católica, que volvió al país a principios de los años 90, después de la caída del muro de Berlín, es de 177 miembros. Con respecto al pasado, en el país hay mucha más gente interesada en la fe católica. Hoy la población mongol es más consciente, tiene mayor apertura y confianza respecto a la fe católica como lo testimonian los nuevos bautismos que hay cada año. En el país la nueva evangelización va viento en popa: se abren nuevas iglesias porque las ya existentes siempre están llenas, y no logran atender pastoralmente a toda la porción de pueblo de Dios que les ha sido confiada. Quien más se acerca son sobre todo los jóvenes entre 16 y 30 años que "tienen sed de Dios". El régimen comunista creó un vacío en el alma del pueblo. Hoy Jesucristo, anunciado por la Iglesia, llena este vacío. (PA) (Agencia Fides 7/2/2005 Líneas: 33 Palabras: 459)
