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Colombo (Agencia Fides) – “Sri Lanka merece paz, prosperidad, dignidad e igualdad de derechos para todos: para ello es necesario trabajar y rezar incesantemente por la paz” ha dicho en un coloquio con la Agencia Fides Mons. Oswald Gomis, Arzobispo de Colombo y presidente de la Conferencia Episcopal.
El Arzobispo ha comentado a Fides la decisión de Liberation Tiger of Tamil Eelam (LTTE) de suspender la participación en los coloquios de paz: “Hoy existen fuertes presiones sobre las partes para reanudar las negociaciones que desde hace un año estaban produciendo alentadores pasos. También la Iglesia está realizando su parte. El término ‘suspensión’ hace de todas formas esperar algo bueno: se trata de una acto temporal” Los tamiles lamentan el intento del gobierno de marginar su papel en la reconstrucción del país, en el relanzamiento de la economía, en la gestión de las áreas del Norte y Este de Sri Lanka en su mayoría tamil. Entre los problemas que todavía no han encontrado solución está el de los refugiados tamiles (que querrían volver a sus casas en el Norte) y el desarme de las guerrillas que, afirma el LTTE, no puede ser unilateral.
Mons. Gomis señala que, a pesar del estado en las negociaciones, la economía está en reanudación y el clima político en el país esta en mejoría: “A nivel político continúan algunos problemas entre los partidos, pero más importante es que se ha comenzado a reconstruir la confianza entre las partes. Y entre la población todos comprenden que la paz es la única vía para el bien y el desarrollo del país”.
Los Obispos de Sri Lanka han difundido recientemente un mensaje en el que piden al gobierno y a los tamiles que retomen lo antes posible el proceso de paz. El llamamiento firmado por Mons. Gomis, afirma: “El estado en los coloquios crea preocupaciones en todos los ciudadanos ceilandeses que aman la paz. Esperemos que las partes implicadas realicen todos los esfuerzos para el diálogo”. Los Obispos invitan a los católicos “a rezar incesantemente por la retoma de las negociaciones y por su éxito, para que en el país reine la armonía entre todas las comunidades”, recordando “que el Santo Padre ha subrayado la necesidad urgente de trabajar por la paz, para crear relaciones entre los pueblos basadas en la justicia y la solidaridad”.
El documento afirma que todos los ciudadanos deben jugar un papel activo para sostener la paz y recordar a “todos los líderes políticos que no se puede volver atrás”.
Entre tanto, la Iglesia organiza a nivel popular programas de reconciliación y educación al diálogo dirigidos de modo especial a los jóvenes y niños. El Padre Francis Jayakody, responsable de la Comisión para el Desarrollo Social de la Archidiócesis de Colombo, dice a la Agencia Fides: “Trabajamos para reforzar la unidad y la confianza entre el Norte y el Sur con el apoyo de escuelas, parroquias y diócesis. La respuesta de la gente es buena, como se ha visto recientemente en la fiesta del Vesakh. Sobre todo entre los jóvenes y los niños es más fácil construir la fraternidad: ellos son el futuro del país, a ellos confiamos un nuevo periodo de paz para Sri Lanka. El proceso de paz es posible hoy porque es un deseo común de toda la población, probada durante veinte años de guerra. A nosotros nos espera el trabajo de lanzar puentes y la religión puede ser un elemento de unión que favorezca y desarrolle el diálogo y el respeto recíproco”.
Según el P. Francis “la Iglesia católica en particular, teniendo miembros de los dos grupos étnicos singaleses y tamiles, puede desarrollar un papel importante para sanar las heridas y construir nuevas relaciones. Soy optimista porque veo que entre la gente hay un clima de serenidad”.
La guerra civil comenzó en 1983 y ha producido más de 65.000 victimas y mas de un millón de refugiados. En febrero del 2002 se firmó un alto al fuego y se inauguraron las negociaciones con la mediación de Noruega.(PA) (Agencia Fides 6/5/2003 Líneas: 49 Palabras:684)
