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Deribat (Agencia Fides) – La población que huyó de las zonas de conflicto ubicadas en la zona volcánica de Jebel Marra en Darfur, al oeste de Sudán, y que ahora vive en el norte o en la parte oriental de Deribat, lamenta la proliferación de numerosas enfermedades y la escasez de alimentos, medicamentos y artículos de primera necesidad. Según las organizaciones humanitarias, desde el 1 de febrero, son más de 36.000 los nuevos desplazados en el norte de Darfur a causa del conflicto armado entre las fuerzas gubernamentales y los movimientos rebeldes.
Una fuente de la emisora local Radio Dabanga refiere que los desplazados en las zonas de Fanga y Dobo El Omda, en el East Jebel Marra, tienen enfermedades de la piel, fiebre, diarrea, dolores de cabeza. Las enfermedades de la piel comenzaron a extenderse entre los adultos y los niños hace una semana, con erupciones cutáneas que causan picazón tan fuerte como para no dormir. La mayoría de los desplazados han buscado refugio en Tawila, El Fasher, y en la ciudad de Um Baru, registrando un incremento de casi 16.000 unidades en comparación con la semana anterior.
Se necesitaría una intervención rápida de las Naciones Unidas y de las organizaciones humanitarias, ya que se prevé que la cifra real podría ser mayor, porque no se puede acceder y verificar la situación debido a la inseguridad en Jebel Marra, donde se concentran los combates. La Oficina de las Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios (OCHA) informa que las agencias de ayuda y la UNAMID han registrado 4.500 nuevos desplazados que buscan refugio en el área protegida cerca de la base de la misión de paz en Um Baru. Estiman que 15.500 personas han buscado refugio en la zona. El grupo permanece en la zona durante el día y vuelve a casa por la noche (AP) (12/2/2015 Agencia Fides)
