AMERICA/MEXICO - Emigrantes: un fenómeno difícil de cuantificar, pero entre ellos hay muchos niños

martes, 10 febrero 2015

Nuevo Laredo (Agencia Fides) – A pesar de que el número de migrantes que llega a la frontera de Nuevo Laredo (México) ha disminuido con relación a años anteriores, la preocupación del obispo de la Diócesis, Su Exc. Mons. Gustavo Rodríguez Vega, se mantiene alta, debido a la situación de riesgo y vulnerabilidad en que se encuentran estas personas desde el momento en que ingresan a territorio mexicano.
El obispo mismo, en una nota enviada a Fides, comenta: estamos atentos a lo que venga, ya que es un fenómeno siempre muy variante, y con todas las amenazas que les esperan durante el camino”. En particular recuerda las dificultades en salir al tren, “porque ahora es más difícil que lo puedan hacer y ello ha provocado que su número disminuya”.
La diócesis está dispuesta a brindarles atención tanto a los que llegan a esta ciudad de Centroamérica, como a los que son expulsados de Estados Unidos
Mons. Gustavo Rodriguez Vega recuerda que la semana pasada los obispos en el sur de México se reunieron para discutir la cuestión de los emigrantes que llegan aquí provenientes de diversos países de Centro y Sudamérica (véase Fides 2/02/2015), y define este encuentro como “muy importante”.
La nota recibida en la Agencia Fides señala también los datos de la Casa del Emigrante en la ciudad de Nuevo Laredo: en 2013 fueron acogidas 7.263 personas, entre centroamericanos y mexicanos expulsados de los Estados Unidos. La cifra es similar a la del año pasado 2014, cuando hasta noviembre la Casa había recibido unas 7.000 personas, de las cuales 310 niños. Entre ellos 137 eran extranjeros: el 70 por ciento provenía de Honduras y el restante 30 por ciento de El Salvador. (CE) (Agencia Fides, 10/02/2015)


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