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Lahore (Agencia Fides) – “El terrorismo en Pakistán se ha convertido en una realidad muy violenta en los últimos años. El número de víctimas de atentados terroristas ha aumentado a casi 60.000 en los últimos 13 años. El gobierno protege a las instituciones y las áreas militares, pero también debe proteger a la sociedad civil y a las comunidades minoritarias de estos talibanes. Cristianos, hindúes, ahmadis e incluso los musulmanes moderados viven en el miedo y muchos están tratando de salir del país. En 2012, miles de hindúes abandonaron Pakistán y se refugiaron en la India, miles de cristianos buscaron refugio en el sur de Asia”. Lo declara a la Agencia Fides, comentando el reciente ataque en el aeropuerto de Karachi, reivindicado por los talibanes, Farrukh H. Saif, Director Ejecutivo de la Ong “World Vision in Progress”, que se dedica a la protección y seguridad de los cristianos y de las demás minorías en Pakistán.
“No es el primer ataque en zonas de alto valor militar o civil o religioso”, remarca Saif. “Todo comenzó con las controversias políticas de islamización de Muhammad Zia-ul-Haq en los años '80. Estas políticas han destruido la paz y la tolerancia en Pakistán, lanzando una oleada salvaje de sectarismo, fanatismo religioso y justicia sumaria, que se ha apoderado de nuestra sociedad. El extremismo religioso ha crecido más allá de toda proporción”.
En un comunicado enviado a la Agencia Fides por la “Pakistan Peace Coalition”, que incluye a las organizaciones, entes y asociaciones de todas las religiones, incluidos los cristianos, la sociedad civil de Pakistán condena el atentado terrorista en Karachi y pide a las instituciones que garanticen el respeto del Estado de Derecho en el país. El Foro insta a abordar las principales causas de la propagación de la militancia radical y del terrorismo, pidiendo al Estado que se comprometa con el bienestar real y el desarrollo de sus ciudadanos. El presupuesto utilizado para la defensa y la seguridad - se afirma - sigue siendo uno de los más altos en el balance anual del Estado, y, “sin embargo, los ciudadanos de Pakistán están a merced de los terroristas”. (PA) (Agencia Fides 10/6/2014)
