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Roma (Agencia Fides) - "Hambre de pan, hambre de Dios": es el tema elegido en Italia para la Jornada Misionera Mundial, el domingo 24 de octubre, que será también el hilo conductor de los itinerarios formativos y las actividades de animación y cooperación que las Obras Misionales Pontificias han programado para el 2004/2005. A pocos días de la clausura del III Congreso Misionero Nacional, en cuyo Mensaje final se ha recordado que "sólo si conseguimos evangelizar en comunión, la ‘missio ad gentes' no será ya una actividad más para los que trabajan directamente en ello, sino que se convertirá en el corazón mismo de la acción de la Iglesia". Cuanto más fuerte es el entusiasmo en promover formas que se vean, mas grande será también la cosecha en parroquias y en tantos lugares de encuentro de la gente, implicando sobre todo a los jóvenes con su inagotable creatividad.
Caridad es, en efecto, donación: no es pura limosna, sino don de si y división de los bienes. Con el fruto de esta caridad la Obra de la Propagación de la Fe sostiene en África, Asia, América, Oceanía y hasta en Europa, sobre todo en el este, unos 5.000 proyectos para cooperar con las jóvenes Iglesias en su desarrollo y ayudar a todos los pueblos de la tierra a convertirse en la familia de Dios.
La generosidad de las personas y las diócesis en Italia es bien conocida y por ello, es grande el reconocimiento de todos. En el 2003 han llegado de las diócesis las siguientes ofertas: 10.973.217,10 euros para la Obra de la Propagación de la Fe y 51.658,06 Euros para los Catequistas; 2.787.566,89 euros para la Obra de San Pedro Apóstol; 2.604.965,17 euros para la Obra de la Infancia Misionera.
El eslogan "hambre de pan, hambre de Dios", al inicio del año dedicado a la Eucaristía, representa un desafío para todos y un proyecto. Según Mons. Giuseppe Andreozzi, Director Nacional de las OMP, “es un lema y un modo original de afirmar que en torno a Jesús Eucaristía la Iglesia continua comprendiendo el propio carácter de sacramento universal de salvación" y Mons. Angelo Sceppacerca, Secretario Nacional de la Obra de la Propagación de la Fe, a la que está dedicada particularmente la Jornada, recuerda a todos como "cualquier pequeño gesto se multiplica si está motivado por la pasión en el anuncio del Evangelio".
La Jornada Misionera Mundial es pues una gran oportunidad para sentirse en comunión con más de mil Iglesias en todo el mundo, desde Darfur a Colombia, desde el Sur África a Sri Lanka, desde Japón al Caribe, desde Australia a Georgia, desde Irak hasta las más pequeñas comunidades de nuestro País y una ocasión de vivir en plenitud. (S.L) (Agencia Fides 22/10/2004; Líneas: 34 Palabras: 478)
