ASIA/SIRIA - El arzobispo Marayati: las políticas de la comunidad internacional fomentan el éxodo de los cristianos

miércoles, 16 octubre 2013

Aleppo (Agencia Fides) - “En los últimos tiempos entre la gente se ha extendido el rumor de que 17 países han abierto sus puertas a los refugiados sirios. Esta noticia ha vuelto a encender con más fuerza,también entre los cristianos, el impulso de salir de Siria”. Lo declara a la Agencia Fides el arzobispo armenio católico de Aleppo Boutros Marayati, agregando que “por ahora, no se trata de un éxodo masivo, pero el fenómeno involucra a un número creciente de familias”. El arzobispo armenio católico confirma que los cristianos más ricos ya se han marchado, mientras que para otros “sigue siendo peligroso y también muy caro cualquier intento de salir del país, sirve mucho dinero. Pero aquellos que ya han alcanzado el Líbano ahora presentarán a los organismos de la ONU sus solicitudes de expatrio, confiando en que se reciban sin demora”.
Según el arzobispo Marayati “la situación de Siria se hace cada vez más complicada, y cada banalización hace difícil comprender lo que sucede realmente”. Por ejemplo, al lado de los cristianos que huyen hay otros que vuelven a Aleppo después de haberse refugiado en la zona costera de Latakia, porque “no tenían dinero para pagar el alquiler y aquí pueden enviar a sus hijos a las escuelas, que han vuelto a abrir”. Incluso la idea de un frente unido de las milicias de oposición que luchan contra el régimen parece destinado a dejarse de lado definitivamente, porque entre los rebeldes “hay muchas facciones que luchan entre sí en el campo”.
En los últimos días, el ejército de Assad ha vuelto a abrir la carretera que conecta Aleppo a Homs. La flexibilización del sitio ha permitido hacer llegar productos alimenticios a la ciudad que faltaban desde hace meses. Pero el arzobispo Marayati asegura que el alivio concreto percibido por la población ha sido hasta ahora mínimo: “La comida cada vez es más cara, falta la electricidad y el agua en muchos barrios. Pasamos el tiempo distribuyendo alimentos y artículos de primera necesidad, y las familias que piden para ellos siempre aumentan. En los barrios periféricos y los suburbios las explosiones y bombardeos continúan. También ayer, el día de la fiesta musulmana del sacrificio, se oyeron bombas todo el día, sin tregua”. (GV) (Agencia Fides 16/10/2013).


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