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Pilcomayo (Agencia Fides) – “La compra venta de votos no solo es un fraude electoral sino también un pecado, y no tan chiquito”. Ha advertido Mons. Lucio Alfert, O.M.I., Vicario Apostólico de Pilcomayo, en Paraguay. “Es un pecado para los dos, el que compra y el que vende” ha subrayado Mons. Alfert, añadiendo que “la culpa más grave es del que compra, porque está mejor preparado, sabe lo que está haciendo, tiene más autoridad. El vendedor es menos instruido, tiene necesidad de comer, y el comprador se aprovecha de esta necesidad”.
Según una nota enviada a la Agencia Fides, Mons. Alfert ha exhortado a los a los indígenas a que sean conscientes y “no vendan su libertad por un poco de dinero o comida”. El Vicario Apostólico también ha subrayado que hoy día ya existen aborígenes que eligen conscientemente, ya no venden sus votos, a diferencia de antes cuando la venta del voto se había convertido en un flagelo porque lo hacían todos. Mons. Alfert por último ha comentado que “están también aquellas personas que entran en el juego, aceptan la comida de un candidato, pero después a la hora de votar eligen a otro”. (CE) (Agencia Fides, 19/04/2013)
