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Tokio (Agencia Fides) – Paz es la palabra clave que se debe perseguir por todos los medios y con acciones a nivel local y regional, pero también a nivel internacional. El apoyo expresado por el Papa Francisco en las conversaciones con el Secretario General Onu Ban Ki-Moon, son importantes en este momento de gran tensión política y militar en el Lejano Oriente. La Iglesia japonesa “siempre ha promovido la paz y la no violencia: como japoneses y como cristianos, esperamos que se mantengan relaciones pacíficas entre Corea del Norte y los países vecinos, incluido el nuestro”, dice el padre Daisuke Narui, SVD, Director de Caritas Japón.
Si los medios de comunicación internacionales están impresionados por el despliegue de baterías de misiles Patriot en el centro de Tokio, p. Narui explica que “el ambiente en la sociedad sigue siendo bastante tranquilo. La mayoría de los japoneses no piensas que exista una amenaza seria. De hecho, desde siempre, cíclicamente, cuando hay un cambio régimen o tensión en Corea del Norte, han llegado amenazas similares a nuestro país. El gobierno, sin embargo, muestra una mayor atención, justamente, para protegernos de cualquier eventualidad”.
El p. Narui añade un detalle importante: “Hay muchos norcoreanos que viven en Japón. Durante la Segunda Guerra Mundial fueron traídos, a veces por la fuerza, para trabajar. Hoy estoy viviendo en Japón y son parte de la nación. Una razón más para evitar cualquier conflicto. Oramos y esperamos relaciones siempre pacíficas, es más que se puedan mejorar”. (PA) (Agencia Fides 10/4/2013)
