AMERICA/HAITI - Tres años después del terremoto, los Redentoristas reorganizan las Misiones Populares

miércoles, 16 enero 2013

Port-Au-Prince (Agencia Fides) – El p. Jeffrey Rolle y el p. João Pedro Fernandes, Consultores Generales de los Redentoristas, han visitado Haití 3 años después del terremoto que destruyó gran parte de la isla, y de sus estructuras. A continuación publicamos su testimonio enviado a la Agencia Fides. “Al llegar a nuestra casa y nuestra parroquia de San Gerardo en Port-Au-Prince, uno se queda muy sorprendido por los signos visibles del terrible terremoto del 12 de enero de 2010: de la iglesia grande quedan sólo unos muros (una gran tienda sirve temporalmente como templo); la escuela está completamente destruida, funciona con estructuras temporales; el 'monasterio' (la antigua residencia de los Redentoristas de Haití) está todavía a la espera de ser reconstruido. Sin embargo, muchos jóvenes vienen cada día para estudiar junto a los edificios derruidos, quizá gracias a la tranquilidad y la sombra que ofrecen muchos árboles... Esta puede ser la imagen de Haití, a pesar de la devastación causada por el terremoto, por la pobreza y la mala política, que ralentiza aún más la reconstrucción. Los haitianos son gente decente que lucha por salir adelante y soñar con un futuro mejor. La población ve el compromiso de los Redentoristas que siempre tienen mucho que ofrecer para dar a la gente esperanza y motivación. La mayoría de los hermanos tiene una gran vitalidad misionera.
Una experiencia especial es la predicación de las misiones populares en el marco de la familia Alfonsiana. Los Redentoristas trabajan en colaboración con las Compañeras de Jesús (congregación autóctona de religiosas, fundadas por el P. Josef Claessens, redentorista de origen belga) y la Santa Familia, un movimiento laico de animación misionera en las parroquias (también fundado por Josef Claessens en los años 70). Es un servicio muy apreciado por la Iglesia en Haití”.
Los dos Consultores Generales también señalan que una presencia Ad gentes comienza a consolidarse en la isla de la Guadalupana, cerca de Haití, y se está realizando una colaboración con la Provincia Redentorista de San Juan (que incluye Puerto Rico y la República Dominicana) para un proyecto de asistencia pastoral de los inmigrantes haitianos en la República Dominicana, en la ciudad de Paraíso.
“La región es bastante joven: el promedio de edad es de 35 años!”, señalando que es “un signo de gran esperanza” que al mismo tiempo implica la necesidad de fortalecer el camino de la formación y preparación de formadores. Tras el terremoto, la congregación se ha comprometido en muchos aspectos por Haití, y 9 de cada 19 jóvenes continúan sus estudios fuera de Haití: 5 en Colombia, 2 en Baltimore (EE.UU.) y 2 en Sant’Anne de Beaupré (Canadá). (CE) (Agencia Fides, 16/01/2013)


Compartir: