EUROPA - El papel del Cristianismo en Europa examinado por los Obispos de la CCEE: una nueva Comisión sobre "Evangelización y Diálogo" para la relación con otras religiones, creencias y culturas

martes, 5 octubre 2004

Leeds (Agencia Fides) - La anual asamblea del Consejo de las Conferencias Episcopales de Europa (CCEE), que se ha tenido del 30 de septiembre al 3 de octubre en Leeds, en Hinsley Hall, ha sido el encuentro más numeroso de Obispos católicos en Inglaterra desde el Sínodo de Whitby en el 664, hace más de 1300 años. En un Mensaje, Juan Pablo II ha asegurado su oración a los Obispos, para que "podáis dirigir a los habitantes de vuestros países a redescubrir su raíz espiritual común y la sabiduría duradera de la herencia cristiana". El Santo Padre ha dicho también que sabe que "vuestro compromiso por una nueva evangelización es un acto de fe en el valor perenne del Evangelio, que ha producido frutos abundantes de santidad, educación, cultura y civilización en la historia de los pueblos europeos”.
Este los temas principales discutidos durante la asamblea destacan: el significado Cristianismo para Europa hoy, Ecumenismo, las Iglesias y la Constitución europea, una tercera Asamblea ecuménica europea, la cooperación entre las Conferencias Episcopales y los proyectos de la CCEE, especialmente en el ámbito de la evangelización y la pastoral.
El Obispo Amédée Grab, presidente de la CCEE, abrió los trabajos planeando algunos interrogantes sobre el tema de la comunicación: la Iglesia a menudo es percibida como en competición con la cultura secular, se la ve como una de las muchas ofertas espirituales del mercado religioso, y con una visión de la vida opuesta a los valores éticos encarnados en las investigaciones médico-científicas actuales. "Somos plenamente ciudadanos de este mundo pero no exclusivamente - el Obispo ha dicho -. No nos bastan los valores de este mundo, aunque no los odiamos, y no nos sentimos por encima de nuestra cultura. Este es nuestro contexto misionero, y cuánto más lo entendemos y respetamos, menos problemático será nuestro trabajo por esta cultura y por todos los que la viven…. Nuestro desafío: ser al mismo tiempo ciudadano de dos sociedades".
El Arzobispo de Burdeos, Jean Pierre Ricard, enumeró algunas instancias que Europa debe combatir y rechazar por el bien de su desarrollo armónico: la tendencia secularizante, con los fenómenos de individualismo y masificación; la tendencia a considerar la religión como un obstáculo, el surgir del fundamentalismo y del terrorismo. Los motivos por los que la presencia de la Iglesia puede ser una riqueza para la sociedad europea son así indicados por el Arzobispo: defender la dignidad de toda persona, de la familia y especialmente de los más pobres y necesitados; crear una correcta distinción entre religión y política; formar para el diálogo ecuménico e interreligioso; crear una cultura de la solidaridad en una Europa abierta al mundo. Se formularon tres compromisos prácticos: reforzar el diálogo con la cultura contemporánea; buscar un diálogo más profundo con el Islam presente en Europa, sobre todo en el mundo académico; continuar la campaña en defensa del domingo, libre de trabajo, como día dedicado a Dios.
El Arzobispo de Canterbury, Dr Rowan Williams, ha hablado además de la nueva toma de conciencia, dentro de la comunidad anglicana, hacia una "Iglesia en forma de misión", dedicada a la evangelización y a dar una nueva forma a la sociedad. Las Iglesias en efecto tienen la responsabilidad de contribuir al desarrollo de la sociedad.
En el curso de la asamblea también se discutieron muchos temas de política europea de interés para la Iglesia: el tratado constitucional; la estrategia de Lisboa; las migraciones; la relación de la Comisión europea sobre Turquía; las cuestiones de bioética. Un tema clave es el de la evangelización y del diálogo con las otras iglesias, religiones, creencias y culturas, para lo que se pondrá en marcha una comisión CCEE sobre "Evangelización y diálogo". (S.L) (Agencia Fides 5/10/2004; Líneas: 46 Palabras: 644)


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