EUROPA/ALEMANIA - Vivir la comunión en la diversidad es posible si permanecemos en Cristo, como los sarmientos en la vid

miércoles, 10 octubre 2012

Stuttgart (Agencia Fides) - «“Yo soy la vid, vosotros los sarmientos” (Jn 15,5). ¿La diversidad - como fruto de pertenencia?»: las palabras de Jesús en el Evangelio de Juan y una pregunta, que suscita la realidad de las migraciones, han acompañado la Scalabrini-Fiesta de los Frutos 2012. Según la información recibida en la Agencia Fides, el encuentro se ha llevado a cabo del 5 al 7 de octubre en el Centro de Espiritualidad de Stoccarda de los Misioneros Scalabrinianos, con la colaboración de las Misioneras seculares Scalabrinianas.
En la actualidad, la movilidad de las personas y el mezclarse de tantas diversidades culturales, lingüísticas y religiosas hacen crecer la necesidad de encontrar los fundamentos y los caminos a recorrer para forjar un futuro de paz y convivencia entre los pueblos, pero también de relaciones auténticas entre los individuos y las familias. Entre los 200 participantes en la Scalabrini-Fiesta estaban presentes los representantes de todos los continentes y, además de los adultos y los niños, había muchos jóvenes que viven la experiencia de la emigración y llevan consigo la pertenencia a diferentes culturas.
El Foro de reflexión ha permitido profundizar en el tema de la Fiesta. El Obispo Auxiliar de la Diócesis de Stuttgart, Su Exc. Mons. Thomas Maria Renz, responsable de la pastoral juvenil y los institutos de vida consagrada, ha comentado el pasaje del Evangelio de Juan, señalando que estamos profundamente unidos en nuestra diversidad, si permanecemos en Cristo como sarmientos unidos a la vid, y recibimos los frutos del Espíritu, como el amor, la alegría, la paz: entonces ya no somos extranjeros sino que nos reconocemos como hermanos y hermanas.
El Foro ha continuado con los testimonios de vida de una misionera secular scalabriniana en el encuentro con el mundo de las migraciones y de una joven pareja de casados, él de Camerún y ella de Italia. Diferentes vocaciones que, a partir de la misma fuente de amor universal - Jesús crucificado y resucitado -, proclaman en la Iglesia y en la sociedad actual que se puede vivir la comunión en la diversidad. (LD/SL) (Agencia Fides 10/10/2012)


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