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Bangui (Agencia Fides) – La exhortación a tomar cada vez más el propio papel en la organización y en la animación de las comunidades cristianas, porque se trata de “una manera eficaz de tomar parte activa en la misión de la Iglesia”, la ha realizado el Cardenal Fernando Filoni, Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, a los representantes de los movimientos, asociaciones y grupos de laicos de las distintas diócesis de la República Centroafricana, con los que se ha reunido en el “Centre Jean XXIII” en Bangui, el 20 de julio.
El Prefecto de la Congregación Misionera ha reafirmado que “todos los cristianos, por su bautismo, están llamados a ser misioneros y a evangelizar, cada uno según su propia identidad en la Iglesia y su estatus social y profesional”. Luego ha continuado: “La participación activa en la misión evangelizadora de la Iglesia se encuentra hoy en día, específicamente en el fortalecimiento de la fe y el testimonio auténtico de los cristianos. Por tanto, esforzaos en ser 'sal y luz' en esta tierra Centroafricana”.
A los laicos se les pide “una buena y adecuada formación espiritual y doctrinal”, ha subrayado el Cardenal, y en este sentido, el Año de la Fe “es una ocasión propicia para el descubrimiento y estudio de los contenidos fundamentales de la fe”. Este año en particular, el Prefecto de la Congregación Misionera espera que “también puede ofreceros la oportunidad para la reflexión y la acción conjunta a fin de continuar con valentía y en profundidad la obra de la evangelización, renovando vuestro testimonio de fe”.
En su discurso, el Cardenal Filoni se ha centrado principalmente en la atención que se debe prestar a los jóvenes, quienes tienen en sus manos el futuro del mundo y de la Iglesia, y en las vocaciones al sacerdocio y a la vida religiosa. Tras recordar que la pastoral de las vocaciones tiene como protagonista a la comunidad eclesial en sus diversas expresiones, el Cardenal ha señalado que a los laicos “se ha confiado una responsabilidad muy especial en el acompañamiento de las vocaciones al sacerdocio y a la vida religiosa”: “como responsables de las familias cristianas, vosotros participáis de una manera especial y original en la misión de la Iglesia, maestra y madre. ¡Que vuestras familias puedan ofrecer a la Iglesia vocaciones auténticas!”
El Prefecto también ha recordado el deber de los laicos de proporcionar un apoyo económico a la Iglesia, para que pueda disponer de lo necesario para el culto divino, las obras de apostolado y de caridad, y el sustento de sus ministros. El cardenal ha terminado su discurso con esta exhortación: “Fieles laicos, es a través de ustedes que la Iglesia se hace presente y activa en la vida del mundo: el mundo de la política, la cultura, las artes, los medios de comunicación y de las muchas asociaciones. Os animo a tener una presencia en estos mundos activa y valiente, una presencia sin complejos ni vergüenza, sino más bien orgullosa y consciente de la valiosa contribución que podéis hacer como discípulos de Cristo, 'sal de la tierra y luz del mundo'” (SL) (Agencia Fides 21/07/2012)
