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Brazzaville (Agencia Fides) – “Lo que nos preocupa ahora son las personas que se han quedado sin hogar, cuyas casas han sido destruidas o se encuentran en la zona cerrada por las autoridades militares” dice a la Agencia Fides Su Exc. Mons. Jan Romeo Pawlowski, Nuncio Apostólico en Brazzaville, que fue sacudida el 4 de marzo por las explosiones en cadena que se produjeron en el deposito de municiones del cuartel de Mpila (véase Fides 5/3/2012). El Nuncio ha visitado algunos de los albergues habilitados por la Iglesia, el más grande está en la Catedral. “Los responsables de esta estructura me decían que en este complejo han acogido a unas 4.000 personas. Tratamos de hacer todo lo posible, hemos montado varias tiendas de campaña, aunque la plaza de la catedral es bastante limitada”.
Mons. Pawlowski está impresionado “por la extraordinaria solidaridad popular”; “hay personas que siguen dando pan y otros géneros de primera necesidad, otros preparan la comida, especialmente para los niños. Se ha creado una enfermería móvil para tratar los casos más urgentes, sobre todo los casos de malaria y diarrea”. En este sentido, el Nuncio ha añadido que “lo más urgente y grave es el agua. La potable para beber se ha solucionado porque se ha creado una cadena de distribución de botellas, pero no hay agua para el lavarse, ni para los baños”.
Por último, preguntamos cuáles son las necesidades más importantes. “Lo que más se necesita son los medicamentos. Los más simples los encontramos aquí, y también hemos podido recoger algunos fondos para comprar medicamentos para tratar la malaria, así como vendas desinfectantes. El problema se propondrá cuando pase la ola de emergencia, cuando la solidaridad internacional se debilite, pero las necesidades sigan existiendo”, dice el Nuncio.
La Agencia Fides ha recibido por parte de la Comunidad de Carmelitas Descalzos la desmentida de la muerte del padre Jean-Marie Bukusa Malu, párroco de Nuestra Señora de Fátima en Mpila, que habría muerto en el colapso de la iglesia de San Luis de los Franceses, donde se iba a celebrar una misa en el momento del desastre. “No tengo noticias de víctimas o heridos entre el personal de la iglesia”, confirma a Fides el Nuncio. (LM) (Agencia Fides 08/03/2012)
