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Roma (Agencia Fides) – Naciones Unidas, Vaticano y Comunidades terapéuticas, juntas para combatir un fenómeno no solo sanitario y psicológico sino sobre todo cultural, social, ético y político. Con ocasión de la Jornada mundial contra la droga, señalada por las Naciones Unidas para el 26 de junio, se han reunido en Roma representantes de la ONU, de la Iglesia, de los países productores y consumidores de droga, de las Comunidades terapéuticas italianas para analizar el problema de la tóxico dependencia no tanto desde el punto de vista sanitario y psicológico, sino sobre todo cultural, social, ético y político.
La ocasión es ofrecida por el Simposio internacional que se abre hoy 23 de junio, sobre el tema “Atender al otro: la drogodependencia entre la experiencia y la moral” organizado por la Federación Italiana de Comunidades Terapéuticas y por el Instituto de investigación y formación “Proyecto Hombre”, en colaboración con el Consejo Pontificio para la Pastoral Sanitaria. Durante el Simposio, que concluirá mañana, se difundirá también como avance, el mensaje del Secretario general de la ONU, Kofi Annan, para la Jornada mundial contra la droga.
Entre los diversos ponentes intervendrán en el Convenio se encuentran Su Exc. Mons. Javier Lozano Barragán, Presidente del Consejo Pontificio de Sanidad; Tony Anatrella, psicoanalista francés y estudioso de la problemática de la adolescencia; Ricardo Grimson, psiquiatra y responsable de la toxicomanía del gobierno argentino; Su Exc. Mons. Angelo Bagnasco, Secretario de la Comisión para la Educación, Escuela y Universidad de la CEI; Agnes Heller, filósofa húngara hebrea, superviviente de la ocupación nazista y soviética y particularmente conocida en Italia por sus estudios sobre problemáticas sociales. Habrá además sesiones especiales reservadas a experiencias de particular relevancia que mostrarán el entramado del proyecto de distribución controlada de heroína; la evolución del fenómeno de la droga en los países del este; las dificultades de recuperación para los drogodependientes emigrantes; las experiencias de Comunidades en países productores de cocaína; la situación medio-oriental en los países mayores productores de opio después de los recientes conflictos; la descripción de la situación sobre la drogodependencia en África.
En la relación de apertura del Convenio de esta mañana, Mons. Lozano Barragán, Presidente del Consejo Pontificio para la Pastoral Sanitaria, se centró sobre todo en el pensamiento del Santo Padre en su Mensaje referente a la drogodependencia. En la intervención pasó revista a diversos puntos partiendo del Congreso Eclesial sobre la droga “solidarios por la vida”, promovido por el Consejo Pontificio, del que el es Presidente, tenido en Roma en 1997, que constituye una respuesta clara y exhaustiva de la Santa Sede a la degeneración ética y desintegración social causada por la droga.
En su relación Mons. Lozano Barragán presentó después las enseñanzas del Santo Padre referentes al fenómeno de la droga, sus causas, las raíces y motivaciones, expuso después el juicio moral y sugerencias propuestas como remedio. “La opinión de la Iglesia sobre la inmoralidad del abuso de la droga es clara – dijo el Prelado - : la droga es opuesta a los valores y no puede haber moralidad sin valores. En el fondo del problema del abuso de la droga, de su producción, de su distribución y comercialización está la carencia de los valores auténticos que representan la verdadera realización del hombre. Muchas son las acciones necesarias para presentar una batalla eficaz al abuso de la droga pero existe una fundamental sin la cual no se puede alcanzar el objetivo: la restauración con toda su fuerza de la convicción del valor trascendente e irrepetible del hombre y de su responsabilidad de libre auto-realización”.(AP) (Agencia Fides 23/6/2003 Líneas: 51 Palabras: 634)
