ASIA/PAKISTÁN - Joven católico arrestado con falsas acusaciones de robo y linchado por los fundamentalistas islámicos

miércoles, 8 septiembre 2004

Lahore (Agencia Fides) - En este clima de guerra declarado por el fundamentalismo al Islam moderado y a todo el mundo, una noticia que llega del Pakistán a la Agencia Fides evidencia las dificultades que el gobierno paquistaní está afrontando para combatir la amenaza del fanatismo y promover el respeto de los derechos humanos y la libertad religiosa para todas las comunidades.
Un joven católico de 26 años, Nasir Masih, arrestado con la falsa acusa de robo, ha sido torturado y asesinado por la violencia de un grupo de fundamentalistas islámicos.
El joven ha muerto tres días después de la detención, a consecuencia de los violentos golpes y heridas recibidas después de un linchamiento perpetrado por un grupo de fanáticos entre los cuales estaban aquellos que habrían tenido que defenderlo. El episodio ha ocurrido en el mes de agosto, pero sólo ahora, después de oportunas investigaciones y confirmaciones, lo ha comunicado a la Agencia Fides la Comisión Justicia y Paz de la Conferencia Episcopal del Pakistán, que ha relatado con contrariedad y amargura del enésimo caso de violencias contra los cristianos en el país.
El homicidio tiene una motivación "religiosa", ha explicado a Fides Peter Jacob, responsable de la Comisión, con sede a Lahore. “Es una evidente conspiración para golpearme, asesinando a mi hijo”, ha dicho Mukhtar Masih, padre de Nasir, afirmando que “él nunca habría robado nada”.
El 16 de agosto el joven, que vivía en el distrito de Baldia Siekhupoura, a 45 Km. de Lahore, ha sido secuestrado mientras se encontraba en su vivienda y arrastrado con la fuerza de un grupo de musulmanes que lo acusaban de robo. Mientras pocas horas después el despacho de la Policía del distrito comunicó a la familia de haber arrestado al joven. Tres días después ha llegado a la familia la noticia de su muerte, a causa de las numerosas heridas y hematomas hallados sobre todo el cuerpo del muchacho.
En días pasados un grupo de manifestantes cristianos y musulmanes moderados en señal de protesta han bloqueado la calle que conecta Lahore a Siekhupoura, pidiendo el respeto de las minorías y la libertad religiosa y la Policía paquistana ha intervenido para despejar a los manifestantes. La Policía, como lo ha comunicado a Fides la organización Christian Solidarity Worldwide(CSW) que sigue con atención la situación de las comunidades cristianas en el mundo, el abogado de la familia Masih ha sido invitado, con intimidaciones a no denunciar a los responsables del crimen. El Rev. Stuart Windsor, responsable de la CSW ha declarado: “Esta tragedia es el resultado de la inaceptable brutalidad de la Policía y los responsables del crimen tienen que ser entregados a la justicia. Masih no ha sido oficialmente acusado de blasfemia, pero su muerte es la prueba del crecimiento de la violencia fundamentalista contra los cristianos en Pakistán. La violencia es sustentada por la ley sobre la blasfemia y de las maestros extremistas en los madrase.”
La Comisión Justicia y Paz está atenta a las violencias que padecen en Pakistán las minorías religiosas, a menudo víctimas del fundamentalismo. Uno de los sectores de empeño de la Comisión, actualmente, es justo la obra de sensibilización contra la ley sobre la blasfemia.
El homicidio de Nasir sigue al de otros dos jóvenes arrestados con las acusaciones de blasfemia y masacrados por extremistas islámicos o policías. Javed Anjum, 19 años, de Quetta, ha muerto el 2 de mayo pasado e Faisalabad a causa de las 26 heridas que le han infligido sobre todo el cuerpo, un maestro y algunos estudiantes de una escuela islámica, que quisieron convertirlo al Islam. Samuel Masih, arrestado por blasfemia en el mes de agosto del 2003, ha muerto en el hospital el 28 de mayo, después de haber sido hospitalizado a causa de los golpes recibidos en la prisión, por mano de un carcelero musulmán fundamentalista. (PA) (Agencia Fides 8/9/2004 líneas 55 palabras 315)


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