ASIA/COREA DEL SUR - Señales de esperanza para la familia en Asia: las conclusiones de la 8ª Asamblea de la Federación de las Conferencias Episcopales Asiáticas (Fabc)

Daejon (Agencia Fides) - Hay "grandes señales de esperanza" para las familias asiáticas que viven y testimonian los valores cristianos: es el resultado de la 8ª Asamblea Plenaria de la Federación de las Conferencias Episcopales Asiáticas, FABC, que se ha llevado a cabo en Daejon (Corea del Sur) del 17 al 23 de agosto con el el tema "La familia asiática hacia una cultura de la vida". Al concluir los trabajos, los Obispos, teniendo en cuenta el contexto en el cual las familias cristianas viven en Asia, en condiciones de exigua minoría religiosa, han subrayado que ellas son capaces de testimoniar valores como la veneración por la vida, la hospitalidad, el respeto de los ancianos, el amor por los hijos.
En la gran reunión de los representantes de las Iglesias asiáticas han participado 186 delegados, entre los cuales 6 Cardenales, 25 Arzobispos, 60 Obispos, 29 sacerdotes, 3 religiosos, 8 religiosas, 55 laicos, hombres y mujeres.
Estuvieron presentes, entre otros, el Card. Telesforo Toppo, Presidente de la Conferencia Episcopal India; el Card. Varkey Vithayathil, Arzobispo siro-malabar de Ernakulam-Angamaly; el Card. Julius Rijadi Darmaatmadja, Arzobispo de Jakarta y Presidente de la Conferencia Episcopal Indonesa; el Card. Jean-Baptiste Pham Minh Mano, Arzobispo de Ho Chi Minh City (Vietnam); el Card. Pablo Shan Kuo-hsi, obispo de Kaohsiung (Taiwán). también han intervenido dos representantes de la Santa Sede, el Card. Fumio Hamao, Presidente del Pontificio Consejo para los Migrantes y Mons. Robert Sarah, Secretario de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos.
En el mensaje conclusivo los Obispos, no escondiendo las dificultades que la familia tiene que afrontar en el continente asiático, cada vez más señalado por la globalización cultural, por el individualismo, el materialismo y el laicismo, subrayan que "sólo una cultura de la vida inspirada en los valores del Reino de Dios predicada por Jesús", puede promover el bien de las familias. La cultura de la vida significa "la protección de la vida humana en todas sus dimensiones, desde la concepción hasta la muerte" y la "primacía de la dignidad humana sobre la eficiencia y la economía."
Durante los trabajos de la asamblea, los delegados han examinado y discutilo el Instrumentum laboris que enumeraba algunos problemas que afligen a muchas familias asiáticas: la pobreza, las migraciones, la explotación de las mujeres y los niños, los problemas de la globalización y el laicismo y los de las culturas tradicionales.
Entre los desafíos señalados en el documento, está el crecimiento en Asia de una cultura contra la familia, la falta de respeto por la vida, el alto número de divorcios. La Iglesia quiere responder a estos desafíos con la visión cristiana de la familia.
Los grupos de trabajo estaban organizados en base a la procedencia regional y lingüística de los delegados. En el grupo dedicado al diálogo interreligioso y a la familia ha habido testimonios de parejas "mixtas", ya que las bodas entre personas de diferente religión son cada vez más un desafío pastoral para la Iglesia en Asia.
Los obispos asiáticos también han recibido la visita de mons. Wilton Gregory, Presidente de la Conferencia Episcopal de los Estados Unidos. Él ha hecho notar que, a pesar de los muchos problemas que viven las familias asiáticas emigradas en América, "ellas, sin embargo, son capaces de aportar un testimonio luminoso de unidad y concordia, de amor y dedicación." (PA) (Agencia Fides 30/8/2004)