OCEANIA/NUEVA ZELANDA - Crecen en el 2004 las inscripciones en las escuelas católicas, apreciadas por la calidad de la instrucción, del profesorado y de las estructuras

martes, 15 junio 2004

Wellington (Agencia Fides) - La confianza en la instrucción impartida por institutos católicos está creciendo entre la población neozelandesa. Según comunica la Oficina de Educación Católica de la Conferencia Episcopal de Nueva Zelanda, en el 2004 se ha registrado un incremento de las inscripciones, debido a la general aprobación por la alta calidad de la instrucción ofrecida por las escuelas católicas.
La Relación sobre la educación en Nueva Zelanda, publicada por el gobierno en junio de hace un año, elogia las escuelas católicas por sus estructuras, por el personal y por los programas propuestos. Esta apreciación pública ha contribuido a delinear un cuadro completo de la actividad de la Iglesia en el campo de la instrucción, reforzando la confianza de los ciudadanos (incluso no católicos) y dando nuevos estímulos a los institutos católicos sobre las nuevas actividades a realizar.
En el 2004, en efecto, las escuelas católicas han realizado actividades para aumentar la participación y la implicación de los estudiantes, adoptando estrategias didácticas de vanguardia, proponiendo cursos y programas de formación fuera de los programas escolares tradicionales.
Además, señala la Oficina de Educación Católica, las escuelas católicas continúan creciendo en número, encontrando pronto nuevos miembros, y ésta es una señal positiva de expansión: al inicio del 2004 se abrieron las puertas del Colegio Santa Maria en Aukland, que pronto se prevé que llegará a 1.000 miembros. Se trata de la novena nueva escuela abierta en nueve años.
En Nueva Zelanda hay actualmente 240 institutos de instrucción católicos que cuentan con más de 62.000 estudiantes inscritos. Se encuentran sobre todo en los centros urbanos y apuestan mucho a la calidad de los maestros y los programas escolares: por ello conquistan la consideración y la estima de los padres. Las escuelas, además, no son confesionales: se basan en cambio en el concepto del "bien común", contribuyendo a la formación de la conciencia de todo ciudadano y ofreciendo a cada uno los instrumentos para construirse una vida de felicidad y bienestar.
(PA) (Agencia Fides 15/6/2004 Líneas: 26 Palabras: 353)


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