AMERICA/ECUADOR - Inicio de la Campaña de Solidaridad Munera 2009 a favor de las escuelas necesitadas de la Frontera Norte

jueves, 26 febrero 2009

Quito (Agencia Fides) – Con el inicio de la Cuaresma ayer 25 de febrero, ha comenzado en Ecuador, campaña Cuaresmal de Solidaridad MUNERA, que la Iglesia en el Ecuador realiza desde 1976, según se lee en un comunicado enviado a la Agencia Fides.
Este año la Campaña Múnera estará destinada a las escuelas pobres de la frontera norte, para mejorar su infraestructura, promover la calidad de los medios e insumos educativos, respaldar la cualificación y el trabajo diario de los maestros. Esto constituirá un respaldo al trabajo pastoral y educativo que durante varios años lleva adelante la Iglesia en esa zona.
“El Evangelio del miércoles de ceniza- se lee en el comunicado- Jesús nos invita a la solidaridad, a provocar en nosotros y en nuestras comunidades un auténtico compromiso de vida con quienes más necesitan: los pobres, los enfermos, los ancianos, los niños que llaman a nuestra puerta y golpean nuestra conciencia. En esta cuaresma cada cristiano, cada comunidad, tiene la oportunidad de acercarse, tocar y cargar con el dolor del hermano tantas veces abandonado y MÚNERA nos da la posibilidad de hacer algo que vaya más allá de las palabras, en esta campaña 2009 nos invita a ser solidarios con las pequeñas escuelas de la frontera Norte”.
A pesar de tantos esfuerzos realizados, la situación educativa en las zonas rurales del país continua mostrándose llena de deficiencias y de necesidades. A ello hay que añadir la problemática específica de las jurisdicciones eclesiásticas en la frontera Norte (Esmeraldas, Tulcán, Sucumbíos y Coca) lugares a los que cada día se atiende a miles de desplazados que huyen de la violencia y enfrentan tantas dificultades de integración social, problemas de narcotráfico. Se suma además la falta de recursos, que afecta de forma evidente la calidad de la tarea educativa, de los niños empobrecidos.
“Aunque la Campaña Munera sea sola una gota de agua en medio de un océano de necesidades, es un esfuerzo de la Iglesia en el Ecuador para motivar a la solidaridad a todos los fieles a imitación de Cristo que dio su propia vida para que nosotros tuviéramos vida en abundancia. Es también una ocasión propicia para poner por obra el amor al prójimo”, concluye el comunicado. (RG) (Agencia Fides 26/2/2009)


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