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Roma (Agencia Fides) - Las organizaciones humanitarias internacionales intensifican sus compromisos en favor de los prófugos sudaneses en el Chad, fugitivos a causa de las violencias en el Darfur, al oeste de Sudán. Entre los organismos más comprometidos en el el Chad se cuenta el Jesuit Refugee Service (JRS) que, a petición del Arzobispo de N’Djamena, capital del Chad, ha enviado un equipo para analizar las necesidades de los refugiados con el fin de enviar a los campos un grupo especializado de personas para procurar servicios sociales e instrucción. El JRS ha aceptado inserir sus evaluaciones y propuestas en los documentos de Cáritas Internacional y de la SECADEV (Cáritas Chad) así como utilizar su estructura si se toma la decisión de enviar un equipo al Chad. Se espera que la recogida de información termine a comienzos de mayo y que se pueda dar inicio a un proyecto concreto en el mes de junio.
Cáritas Internacional “ha lanzado un llamamiento para la recogida de unos dos millones de dólares en favor de los refugiados sudaneses en el Chad”, como se lee en un comunicado llegado a la Agencia Fides. Según un responsable de Cáritas Internacional, “la situación en los campos de refugiados del Chad se está deteriorando rápidamente”. El hambre y la malnutrición crecen tanto entre los residentes de los campamentos de prófugos como entre aquellos que están todavía en camino para llegar al Chad desde Sudán. Los prófugos, en su desesperada busqueda de alimento, se ven obligados a comer las hojas de los árboles.
Son más de 150.000 los prófugos sudaneses en el Chad, fugitivos a causa de las violencias en Darfur. Se calcula que haya otro millón de refugiados internos en Sudán. Las agencias humanitarias han propuesto al gobierno sudanés la creación de un corredor humanitario en Darfur para asistir a las víctimas de la violencia.
Cáritas del Chad ha creado y dirige tres campos de acogida en el Chad, cada uno de los cuales acoge unas 10.000 personas, que aumentan de día en día.
“El Alto Comisariato de las Naciones Unidas para los Refugiados (UNHCR) está preocupado por las graves dificultades que debe afrontar en una de las más comprometedoras operaciones humanitarias en curso”, se sigue leyendo en el comunicado enviado a la Agencia Fides. “Entre los principales obstáculos están la inseguridad y el aislamiento del área interesada, que se articula a lo largo de una franja fronteriza de cerca de 600 kilómetros”. A los problemas logísticos y a las difícultades de transporte, se unen la falta de agua para los campamentos - donde la población sigue creciendo- y las escasas posibilidades de conseguir carburante y leña para hacer fuego. Todo esto hace difícil también la elección de otros lugares donde poder preparar nuevos campos. Además el nivel de financiación de las operaciones es todavía particularmente bajo. Dada la perdurante gravedad de la situación en la región de Darfur, la UNHCR prevee que tendrá que actualizar su propio plan de trabajo para las o peraciones en el Chad oriental sobre la base de una cifra bastante superior a la de 110.000 refugiads hasta ahora utilizada. (L.M.) (Agencia Fides 12/5/2004 Líneas: 40; Palabras: 539)
